Reflexiones Sobre La Acción Social De Las Empresas

1. ¿Por qué la sociedad exige responsabilidad de las organizaciones?

Resulta inevitable aceptar que en el modelo capitalista, hegemónico durante el buena parte del siglo XX en las principales economías occidentales, las organizaciones empresariales de naturaleza mercantil se constituyen con un propósito que, lamentablemente, no prioriza la creación de beneficios directos e inmediatos para lasociedad. Sin embargo, durante los últimos años, hemos asistido a una llamativa evolución del pensamiento humano que ha favorecido el auge de múltiples agentes bajo formas asociativas diversas, los mismos han impulsado la remoción de algunos principios básicos del sistema productivo ortodoxo, alertando de los riesgos del liberalismo salvaje sobre nuestro hábitat y sobre las propias estructurassociales. Al mismo tiempo, los individuos hemos interiorizado un conjunto de valores novedosos que han resultado determinantes en el nacimiento de la modernidad social, la cual, ante fenómenos como la globalización o los avances en el campo de la comunicación, está obligando mediante diferentes fórmulas de presión a abandonar de manera progresiva el modelo tradicional de empresa, entendida comounidad de producción de bienes y servicios para la satisfacción de las necesidades de los individuos, con el objetivo de atribuirle una funcionalidad de naturaleza ética. Más si cabe en el momento actual, donde el sistema económico está haciendo declinar la influencia de los propios Estados revalorizando el poder de las organizaciones, lo que, a su vez, se traduce en que el impacto de éstas sea cadavez mayor tanto en la sociedad como en la configuración del planeta en su conjunto. El fundamento obedece a que las empresas operan en un sistema abierto caracterizado por la inexistencia de acciones autónomas o independientes, ya no caben, entonces, estrategias limitadas simplemente a promover los intereses de los accionistas.

En base a lo expuesto, la sociedad ha reconocido la capacidad de laempresa para ser un elemento dinamizador del cambio, y no sólo refiriéndose al contexto económico, de ahí que se le dote de un mayor protagonismo en el desarrollo de políticas públicas y, además, se le exija una estrecha colaboración con las instituciones nacionales para la resolución de aquellos problemas que afectan a la colectividad. La sociedad civil organizada ha empezado a utilizarcoloquialmente conceptos como desarrollo sostenible, preservación de los recursos ambientales o reducción de las desigualdades, lo que, a su vez, unido a las modificaciones del contexto jurídico, social o cultural evidencia la complejidad del entorno al que toda organización debe adaptarse para poder satisfacer eficazmente las demandas de sus agentes de interés y de los restantes grupos sociales que puedenverse afectados por su actuación.

Este nuevo escenario ha inducido a la empresa a redefinir su rol, quedando vinculada a la asunción de un conjunto de principios éticos y morales que determinan una nueva actitud hacia su entorno social, y que conlleva la promoción de manera genérica y específica del bienestar y calidad de vida de la sociedad como base de la supervivencia en un contextoaltamente competitivo. Ahora bien, esta reflexión no debe inducir a confusión, los ciudadanos, como parte interesada, no deben esperar que el empresariado complemente los intereses económicos asociados a cualquier proyecto mercantil con una gestión racional orientada a la creación de valor para el resto de los actores si, paralelamente, las instituciones carecen de calidad y solidez, es decir, sonmanipulables, influenciables o discrecionales en la aplicación de las reglas. En esos supuestos, la tendencia empresarial, muy probablemente, se escore hacia modos de actuación destructivos. Por ello, la Administración pública, en todo régimen democrático, ha de seguir articulando los mecanismos necesarios para garantizar que las reglas del juego permanecen estables y claras. Como contrapartida, la...