Reforma Electoral

Elecciones, partidos políticos y médios electrónicos en México
por Citlali Villafranco Robles[*]
La joven y frágil democracia mexicana ha enfrentado en los últimos diez años la tensión del dinero y su relación con las campañas electorales. En este artículo se expondrán las bondades de las reformas constitucionales, centrando la exposición en las modificaciones relativas a la relación de losmedios de comunicación con los partidos políticos durante los procesos electorales.
En los últimos años los medios de comunicación, específicamente la televisión, han cobrado gran relevancia, ya que tienen la capacidad de determinar y condicionar el acontecer político. Ello es así ya que la transición democrática y la competencia electoral han ocurrido básicamente en el espacio de los medios decomunicación privados.[1] Esto obligaba a que los partidos políticos en sus estrategias electorales se concentraran en difundir su propaganda en los medios electrónicos, destinando una parte muy importante de sus recursos para pagar este tipo de campaña. Se trataba de un gasto que era necesario financiar, que crecía en cada elección y para el que siempre resultaba limitado el financiamiento público.en difundir su propaganda en los medios electrónicos, destinando una parte muy importante de sus recursos para pagar este tipo de campaña. Se trataba de un gasto que era necesario financiar, que crecía en cada elección y para el que siempre resultaba limitado el financiamiento público.
A pesar de los recursos gastados en estas campañas electorales centradas en los medios de comunicaciónelectrónicos, su resultado en términos de consolidación y ampliación democrática dejaban mucho que desear. Esto obedeció a una razón básica: la competencia electoral que se desarrolla y resuelve a través de los medios de comunicación, particularmente la televisión, entorpece el principio de equidad.[2] Las campañas electorales difundidas por televisión vulneran el principio de equidad en la competencia portres razones.
Primero, porque frente al interés de competir por los votos pagando espacios en la televisión, los partidos políticos tenían poderosos incentivos para buscar fuentes de financiamiento privado.
Segundo, porque existía un espacio prácticamente ilimitado para la discrecionalidad de las televisoras, ya que bajo la fachada de “paquetes”, “promociones” y “bonificaciones” podían otorgarprecios diferenciados a cada uno de los partidos políticos. En realidad, estos precios de las televisoras fueron determinados por su preferencia política. Era perfectamente posible que las televisoras fijaran un precio diferenciado a cada uno de los partidos políticos en función de sus preferencias,[3] lo que tenía un doble efecto altamente nocivo: al tiempo que ubicaba al partido de su preferenciaen una situación ventajosa para la competencia, cuestionaba la independencia del probable gobierno de ese partido político.
Tercero, porque existía una enorme vulnerabilidad del principio de la información disponible para la toma de decisión de los ciudadanos.[4] Los partidos políticos adaptaban sus mensajes a las características de la publicidad comercial reduciendo la difusión de su plataformae ideología a la emisión de breves mensajes que no eran más que frases sueltas y frecuentemente sólo imágenes, que no transmitían información relevante para la toma de decisiones.
Las reformas constitucionales en el país recientemente aprobadas modifican este modelo de comunicación entre ciudadanos y electores; modifica también la relación de los partidos políticos y los medios de comunicaciónelectrónicos y consolida estas dos transformaciones ampliando las facultades de fiscalización del órgano encargado. Con estas modificaciones se busca corregir las dinámicas no previstas en la reforma de 1996 y que ocasionaron serias dificultades en el desarrollo de los procesos electorales de los años 2000, 2003 y particularmente 2006.
Efectos del modelo de comunicación norteamericano en los...