. ¡Esa gente es mi gente!..... Oye leí esto es alguna parte y me parece excelente. A veces me sorprende la incapacidad que se tiene en reconocer y valorar todos y cada uno de los pequeños elementospositivos, agradables, buenos e importantes que se nos presentan en nuestras vidas. Parece que estamos programados para ignorar las manifestaciones de lo posible, las intenciones sanas que nacen o seoriginan en individualidades que quieren darse a conocer y que rechazamos con excusas tontas. Peor aún se tiene la costumbre de fijar la atención en las circunstancias o en las cosas negativas quesuceden a lo alrededor. -Ciertas joyas- han aprendido, desde pequeña a buscar y a resaltar los problemas, las carencias, los errores, los fracasos, sin darse cuenta de que al vivir de esta manera, lohacen sntiéndose desanimadas, frustradas, pesimistas y desesperanzadas con respecto a lo que son. Para ciertas personas que no admiten lo indicado en el título, no tienen nada de extraordinarioactividades tan sencillas como levantarse un día más, estar equilibrada, sentirse bien, disponer de agua potable, tener a alguien con quien compartir, contar con el apoyo de un desconocido o simplemente,sonreir. Viven de los males extremos. Pero cuando se está consciente de que es posible lo cotidiano, como elemento positivo, se resalta, se valora y se minimiza lo negativo. Esto implica dejar de limitarte,quejarte, asumir achaques, evitar juzgar a otros y no hablar de una forma pesada, pesimista, negativa o irresponsable acerca de la situación. Se pueden hacer ejercicios, no me refiero sólo aejercicios físicos, mentales; sino de comportamiento. Hacerlo, te ayudará a cambiar y a mejorar tu actitud frente a la vida. En el reconocimiento de los pequeños regalos esenciales está la posibilidad dedarse cuenta de que se tiene una vida buena y de que se puede sentir agradecidos con la Divinidad, con la vida y sus leyes inexorables y, también, con las personas que, de una u otra forma, contribuyen...
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