Relato


“…la carretera, ahora más sucia, atraviesa el Cinturón Industrial cortando por instalaciones fabriles de todos los tamaños, actividades y hechuras, con depósitos esféricos y cilíndricos de combustible, centrales eléctricas, redes de canalización, conductos de aire, puentes suspendidos, tubos de todos los grosores, unos rojos, otros negros, chimeneas lanzando a la atmosfera borbotones de humostóxicos, grúas de largos brazos, laboratorios químicos, refinerías de petróleo, olores fétidos, amargos o dulzones, ruidos estridentes de brocas, zumbidos de sierras mecánicas, golpes brutales de martillos pilones, de vez en cuando una zona de silencio…”
El comienzo de LA CAVERNA de José Saramago. Pienso que debería ser el comienzo. El viejo comunista portugués no me dio bolilla. Pero si enalguna vida futura (vos también estarías) soy Borges (al que le encanta jugar con las historias) yo escribiría mi Pierre Menard de LA CAVERNA con este comienzo. Seguro me generaría problemas la ceguera, te imaginarás. De todas maneras no voy a aburrirte con un plagio encima mal hecho. Y si te aburro, hace un bollito con esta hoja manchada de tinta y café amarillento, préndete un marlboro (ah!, nofumás ¿fumabas?), y que tu mente divague…
El que divaga…soy yo. Es inevitable, se me complica centrar el pensamiento, la mirada, la idea, la vida. El pensamiento lateral es mi fuerte. Y con cien kilos…esto me hace liviano, volátil, casi leve…y esto sí, es casi insoportable (no sonrías, no hay alusiones a historias pasadas)
En tu honor, en honor a vaya saber que benéfico hado protector que te acercó ami vereda, voy a intentar, lo juro, centrar (iba a borrar ese verbo, pero no, no quiero condicionarme, y no se porque aparece otra vez la sonrisa, y no es que no me guste), voy a contar una historia recogida en los bordes del camino. No soy bueno, solo tengo un poco de oficio, no soy un artífice, solo un copista
Es un regalo…especial. Porque a partir de ahora es tuyo. O sea un verdadero regalo.Eso sí, no tiene moño, ni envoltorio. Alguna vez echó a rodar por el mundo para terminar a tus pies, bajo tu sombra .Me aparece el divague, y como he jurado no filtrar (a propósito, tiralo, solo te queda la colilla).
¡qué bárbaro! Debes estar tentada de encestar en el tachito, y yo en las antípodas de un buen contador.
Empecé por las ciudades porque ellos (los personajes de esta historia)miraban desde sus grises días el ocre de los suburbios. La fealdad de los mugrientos horizontes urbanos, los acompañaban en sus quehaceres, en sus comidas. Formaban parte del olfato y el tacto. (es importante que sepas que amo a las ciudades, que amo sus mugres, sus colectivos hacinados, sus estentóreos bocinazos, no quiero que pienses que prefiero a Hansel y Gretel, en vez de Ganapan y Buscavidas o alos fabulosos personajes de la Santa María de Onetti, o el San Petesburgo de Fedor, porque mirá si te enganchan los tipos campestres. Te comés un garrón. Resulta que te enganchas con un …y te sale un bucoski). Divague…divague. ¿estás ahí? Por las dudas sigo
Los personajes de esta h.istoria eran EL, Ella y cinco ellitos, maravillosos (te sorprendí, esperabas un despliegue de nombres y muchoingenio, lamento decepcionarte, pero…es inevitable). En una ciudad gris, vivian una vida no-gris. Era una vida más que decente, más que decorosa (ahora prendí yo “…el cenicero soportando agravios…” dice un criollo de Huanquelén. Perdón). Era una vida… feliz.
Porque también tenían sueños (se que está mal, que la Academia, si supiera que existo me desafiliaría…pero para mi es punto aparte). Tenían unavida y soñaban otra vida. Amaban el verde, los pájaros el frío cortante…y el calor cortante. Amaban la naturaleza. Cuando los ellitos crecieron un poco. Dieron un salto. Malvendieron su vida feliz pero urbana. Y se fueron al campo. En un pequeño solar armaron una nueva vida. Todo lo que tenían embalado, todo lo que esperaban desplegar, lo desplegaron. Iniciaron una nueva vida. Todo natural,...