Remy Daza Vitalidad Y Madures Estética


Remy Daza vitalidad y madures estética
Por: Amanda Zelaya
Remy, un místico del arte, atrapado hace cuarenta años en los hilos subyugantes de la plástica, tejiendo sueños con elcolor del espíritu; como pocos enamorado de su oficio cumple Bodas de Rubí en el más absoluto recogimiento sin ningún aire pomposo ni sugerente atisbo de vanidad, tomó comocelebración el pincel y la paleta prodigiosa para plasmar con fuerza creativa el trazo inicial y decisivo con alto contenido estético que es la imagen pura de su personalidad.
Ambientessilentes y festivos se suceden unos a otros con las cualidades del color; poblados pintorescos, nacen poéticos, matizando con candidez el espacio. “Nopales” o la simpleza de losgirasoles que se apretujan y abren paso para mostrarse al espectador, son los temas que ilustran los lienzos en tonalidades diversas algunas penetrando a los objetos y remarcandolas líneas en el encuentro con la luz.
No se puede negar que Remy en estos años ha logrado un alto vuelo su arte tiene orientación clara en color, composición, uso de la luz,movimiento como parte de su auto realización espiritual que rompe con la plástica estática sin personalidad; de sus lienzos fluye la vida misma, en un texto fácil de asimilar, enconsecuencia hay una conciliación técnica haciendo de la muestra un todo equilibrado.
La otra faceta de su espíritu expresivo es la sensualidad que evanesce de los desnudos logrados desdela construcción de la forma e inundan el Gildaro como aves exóticas en un legible discurso del cuerpo por la naturalidad con que se propone el tema creando además pautas cromáticasdiversas.
En resumen estamos frente a una valiosa colección, trabajada con esmero, intensidad y experiencia que describe una trayectoria vital y madura. ¡Felicidades!