Renata de negro

RENATA DE NEGRO
Tenía la costumbre de hacer suyo lo que no era de él: era un ladrón. Pero no era un ladrón cualquiera; este, tenía por cómplice al mejor de todos: la noche. Eso lo hacía diferente;de hecho, era la noche la que lo incitaba a robar y, luego de algún golpe del que nadie se enteraba, ni las propias víctimas, su cómplice le exigía su parte del botín, so pena de matarlo de insomnio.Para lograr sus fechorías, la mente del ladrón se transformaba en un caleidoscopio del tamaño de su imaginación, en el que, las imágenes robadas, se multiplicaban por el gusto de multiplicarse, paraluego dividirse entre dos.
Una noche de fiesta, entre música, risas y alegrías dio un golpe maestro. En su caleidoscopio giraba la imagen de una chica nacida para bailar y para arrancarle magia a laimaginación ajena. Era Renata, vestida de negro. Y miraba también a Roberto, el ex novio de Renata, quien se acercó al oído del ladrón para decirle:
-Ya se puso gorda, por eso la corté.
La voz deRoberto sorprendió al ladrón, abstraído en su fechoría, regresándolo a la realidad.
Deseó decir a su Roberto que su afirmación no era cierta; que por su boca hablaba el espíritu etílico de un hombredespechado e incapaz de ver a Renata más allá de Renata.
Iba a decírselo, pero la voz de la noche lo regresó a su mundo mágico diciéndole: “Tú ocúpate de lo tuyo y deja que el mundo gire; si te dice quees gorda, dile que sí; si te dice que es fea, dile que sí y si te dice que el negro es blanco, también dile que sí”.
‒ ¿Verdad que ya está gorda?–, insistió Roberto; y él ladrón le dijo:
–Sí.
–¿Entonces qué le ves?‒ dijo Roberto. El ladrón quiso decirle: “Lo que tú no puedes ver”,
Pero no lo dijo, y continuó deshojando la imagen de Renata, llevando cada uno de sus pétalos a su caleidoscopioredentor.
Lo primero que entró, fue la faldita de color negro que se adhería, como una segunda piel, a la cadera de Renata mientras ella bailaba, seducida por la magia de Bob Marley.
-¡Negro!-,...