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Desarrollo y subdesarrollo como caras de la misma moneda
La década del „60 si bien fue testigo del auge del modelo desarrollista modernizador también lo fue de iniciales y fuertes críticas que maduraron hasta una década después y empezaron a gestar otra visión del desarrollo.
Esta nueva faceta tuvo como telón de fondo la emergencia de movimientos de protesta ligados a la aparición de nuevosEstados soberanos tras la descolonización en Asia y África y, asimismo, la orientación marxista que tomó el campo de las ciencias sociales en Latinoamérica, apoyada en el materialismo histórico, en las metodologías estructuralistas y en la sociología de la Escuela de Frankfurt (Servaes, 1987; Cortés, 1995), donde los conceptos de subdesarrollo y desarrollo fueron vistos ya no como estadioscontinuos de superación sino, más bien, como situaciones que correspondían a un proceso global de evolución del capitalismo mundial.
Aunque la escuela latinoamericana en materia de desarrollo asumió dos vertientes para definir las estrategias y para criticar al esquema desarrollista anterior, una apoyada en el reformismo estructuralista y la otra de corte marxista revolucionario (Kay, 1991), ambascoincidieron en afirmar que el proceso mundial de acumulación capitalista reproducía el subdesarrollo y el desarrollo al mismo tiempo.
Se introdujo entonces, desde las teorías de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL)1, de carácter más bien estructural-reformista, el concepto de subdesarrollo gracias a las propuestas de Raúl Prebisch (1949-1950).
1 Este organismo fue establecido en 1948bajo los auspicios de la Organización de Naciones Unidas por la insistencia de los países de Latinoamérica para orientar y establecer políticas para fomentar el desarrollo económico de las naciones atrasadas, especialmente las dirigidas a América Latina y el Caribe.
Raúl Prebisch
Este autor siguió concibiendo al desarrollo como aumento del bienestar material generado por un incremento en el ingresopor habitante y por la productividad media de trabajo. Esto fue tomado, a su vez, como traducción del 3

crecimiento económico formado a través del progreso y adaptación tecnológicos al proceso productivo.
Pero en el sistema económico mundial, y a diferencia de lo que podría suceder en una economía capitalista aislada, este proceso asumió desde la perspectiva de Prebisch la forma de unaevolución desigual entre economías avanzadas y rezagadas. Así la idea de un desarrollo desigual originario dio lugar a un(os) centro(s) donde primariamente ingresó(aron) las modernas técnicas capitalistas de producción, con estructura productiva diversificada y homogénea y a una(s) periferia(s) que de manera tardía se incorporó(aron) a ellas y quedó(aron) con una producción rezagada tecnológica yorganizativamente, además de especializada y heterogénea (Cfr. Rodríguez, 1980).
La propuesta cepalina planteó, entonces, la necesidad de aumentar los niveles de productividad a través de políticas deliberadas de desarrollo, en donde la idea matriz fue la sustitución de importaciones, para contrarrestar los desequilibrios generados por las economías especializadas y heterogéneas. De aquí surgieron lasprimeras propuestas de integración económica en el continente, con el afán de ampliar los mercados.
Este criterio, más tarde, se mostró insuficiente debido a que se creó mayor dependencia tecnológica con relación a los países del centro junto a una limitada demanda de bienes y servicios provenientes sólo de las clases medias y una escasa absorción de la mano de obra, además de un creciente controlextranjero del sector industrial (Kay, 1991; Servaes, 1987).
Entretanto, la escuela radical de la “teoría de la dependencia”, gestó su rechazo tanto a las tesis modernizadoras como a las cepalinas, y tendió a separarse con críticas más extremas que llegaron a plantear, incluso, la ruptura y la alteración del sistema capitalista y la transformación inmediata a un sistema socialista.
Las...