Represión y tortura en el régimen de Febres Cordero

Resulta imposible, a estas alturas, no reconocer la década del ochenta como una era oscura en la historia del Ecuador. En lo político, económico y social se acrecentaron las brechas como nuncaantes, pero eso no era novedad. Lo que sí era novedad era la supuestamente renovada democracia y sus personajes. Tras la muerte del líder popular y anti-sistema Jaime Roldós, una estela fantasmal cubrió elpaís. La oligarquía más cínica y cruda se tomó el poder y con ellos la sangre tiñó las calles pero las páginas de revistas y periódicos, acaparadas por fuerzas mercantilista, miraban para otro lado.Francois Xavier Tinel, en una reciente investigación académica, logra recopilar información que revela la complicidad de la prensa con el régimen de León Febres Cordero y como, a través de esta, secimentó y fortaleció el poder dominante del Partido Social Cristiano y su política del terror.

Las víctimas del azote socialcristiano recuerdan aquellos años de persecución no solo política sinomediátíca. Jaime Guevara, cantautor quiteño señala de la prensa que “Justificaban los apresamientos de aquellos ‘antisociales’. En la televisión pasaban como flashes aquello de ‘Basta de bestias’ –lafrase de Jaime Nebot, que la acuñó el gobierno para exhibir fotografías de los integrantes de Alfaro Vive Carajo”

Esta actitud contrasta con la algarabía cuando llegó al poder Febres Cordero, asíel defensor de Derechos Humanos, Alexis Ponce rememora “de manera impúdica, los medios de comunicación apuntalan su candidatura (…) Recuerdo las páginas de indisimulada alegría por la victoria de LeónFebres Cordero en El Comercio y en la (revista) Vistazo”

Tras la irrupción de la protesta social, los principales medios de información no dudaron en desplazar el debate social a la crónica roja,donde los reclamos, legítimos o no, tenían un tratamiento directamente delincuencial, generando el rechazo de la opinión pública.

La lamentable desaparición de los hermanos Restrepo encendió las...