Reseña capítulo 3 de el malestar en la cultura

RESEÑA: EL MALESTAR EN LA CULTURA CAPÍTULO TRES |
MARÍA ELIZABETH BUILES HENAO |
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MARTA CECILIA PALACIO
19/03/2010

UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA |

RESEÑA

Freud en el capítulo III del Malestar en la Cultura comienza preguntándose por los motivos por los cuales le resulta tan difícil al hombre ser feliz, y reitera que existen tres fuentes del sufrimiento humano: “lasupremacía de la naturaleza, la caducidad del propio cuerpo y la insuficiencia de nuestros métodos para regular las relaciones humanas”. Lo anterior sucede porque nunca se llegará a dominar la naturaleza, y por tanto el cuerpo que pertenece a ella es “perecedero y limitado en su capacidad de adaptación y rendimiento”. Con relación al tercer motivo del sufrimiento, el hombre se niega a aceptarlo porqueno comprende la razón por la cual las instituciones creadas no representan bienestar y protección para todos; sin embargo, considerando el pésimo resultado de las instituciones en cuanto a la prevención del sufrimiento, Freud sospecha que también en las mismas instituciones creadas por el hombre “podría ocultarse una porción de la indomable naturaleza; tratándose esta vez de nuestra propiaconstitución psíquica”.
Es aquí donde el autor plantea la premisa central del texto, que consiste en que siendo las instituciones creadas por el hombre incapaces en la mayoría de los casos de prevenir el sufrimiento, “ nuestra llamada cultura llevaría gran parte de la culpa por la miseria que sufrimos y podríamos ser mucho más felices si la abandonásemos para retornar a condiciones de vida másprimitivas”, además Freud expresa que los recursos con los cuales el hombre se defiende de los que él llama sentimientos amenazantes, provienen de la misma cultura.
Como segunda premisa, Freud se interroga por los caminos por los cuales el hombre ha demostrado una “extraña actitud de hostilidad” contra la cultura; y señala que tal vez el disconformismo con el estado cultural, gestó la condenación de lamisma.
Para el anterior interrogante se planten tres motivos esenciales: en primer lugar, la degradación de la vida terrenal implícita en la vida cristiana, en segundo lugar, se da porque los europeos, interpretan de manera equivoca la vida simple y feliz de los pueblos aborígenes, estado que parecía inalcanzable para investigadores de nivel cultural más avanzado. Y el último acontecimientoplanteado, se produjo cuando el hombre aprende a conocer el mecanismo de la neurosis y se comprueba que el ser humano cae en ella porque no logra soportar el grado de frustración que le impone la sociedad en aras de sus ideales de cultura, deduciendo que se podría ser feliz atenuando o eliminando las exigencias culturales.
A las anteriores causales se agrega la decepción. Esta decepción se debe aque el hombre, aún después de alcanzar cierto dominio sobre la naturaleza por medio de la ciencia y la técnica, no ha elevado la satisfacción placentera que exige la vida ni la ha hecho más feliz.
Expresa el autor que el dominio de la naturaleza, no es el único requisito de la felicidad humana y tampoco es una meta exclusiva de las aspiraciones culturales. No se quiere decir con esto que losavances tecnológicos sean inútiles para la felicidad, pues es por medio de estos que podemos tener momentos de placer, aunque aquí entra la crítica pesimista advirtiendo que la mayor parte de esas sensaciones placenteras serian como “la diversión gratuita y la representa en la siguiente anécdota: no hay más placer que sacar una pierna desnuda de bajo la manta, en fría noche de invierno, para poderprocurarse placer de volverla a cubrir”.
Según lo anterior, pareciera que no nos sentimos muy cómodos en nuestra cultura pero no es posible saber si los hombres de antes eran más felices y si en ello influían sus condiciones culturales. Siempre pensamos que apreciamos objetivamente la miseria, porque nos situamos en ella con nuestras propias pretensiones y sensibilidades, para examinar luego los...