reseña de ordenar para controlar


 
En el texto reseñado, Herrera plantea como tesis que: A partir de unos modelos deorganización espacial que se crearon en la colonia-representados en los pueblos de indios ysitios- se estableció un modelo alternativo que alteró las ambiciones del orden colonial yque por tanto contribuyeron a subvertirlo. Herrera,
 
anota 4 aspectos que justifican su proposición.El primero es referente a ladistribución de la población en el siglo XVIII, en la cual haceénfasis en la heterogeneidad de los habitantes, es decir, la diversa composición socio racial(mulatos mestizos, zambos, negros, libres de todos los colores) que rodeó el orden colonial.Señala también, las actividades productivas de cada una de los espacios del Caribe, queestaban orientadas hacia la ganadería, la agricultura, laminería y el transporte comercial.
 
Indica la producción de excedentes en el ganado, el tabaco y aguardiente, la caña y otros productos de contrabando que son dirigidos al mercado.Según la autora, el Caribe fue un territorio disputado tanto externa como internamente conel fin de monopolizarlo comercialmente. Para esto, se debían establecer ciertas tácticas desujeción territorial que garantizaran elordenamiento espacial y político de los territorios y pobladores de la región.
 
La comparación entre los pueblos de indios y los sitios de las llanuras del Caribe, se anotaen un segundo aspecto, el cual muestra las configuraciones territoriales-la cuadrícula-, lascondiciones de vida, la influencia geográfica-que determinaba el grado de movilidad y losestilos de vida- y la percepción del entornogeográfico-como un ente en movimiento-.Adicionalmente, se resalta el impacto pedagógico del ordenamiento territorial y elcondicionamiento geográfico al que estaban sometidos los pueblos del Caribe.En cuanto a la organización de los territorios de las llanuras del caribe, el orden lineal de lascasas era una
de las “
razones
”
 por la que los colonizadores alegaban la falta de civilizacióndeestos pueblos. Términos
como “pobreza”,
y
“miseria”
también fueron utilizados paradescribir las poblaciones de la región Caribe. La trashumancia era otro factor que impedíaun ordenamiento espacial, pues la ubicación de pueblos era-a veces-a orillas de ríos yciénagas. La autonomía de estos pueblos también dificultaba un orden.
 
 
Es posible vislumbrar dentro de los planteamientos de la autora,los elementos culturalesque caracterizaron al Caribe (formas de congregación, ausencia de autoridad).
 
Las formasde subversión en el Caribe, se materializaban en las manifestaciones culturales, apreciadasen los
bundes
, en los que se mezclaban elementos festivos, como el licor, el baile y lamúsica. Se percibe aquí, además, un pacto
implícito
entre autoridades civiles ypobladores para con estas prácticas; realmente el control era precario. Las condiciones en que sedesenvuelven los curas dentro de este ambiente, se muestra también en esta parte del texto, pues las condiciones geográficas, logran imponer su poderío frente al proyectoevangelizador y por tanto el control religioso se torna insuficiente en las comunidades-unmotivo más que exonera de poder territorial al régimen colonial-..Los obispos se oponíanrotundamente a estos bundes porque impedían la asistencia a la socialización clerical.Ciertas comunidades quedaban fuera del poder institucional colonial y se agrupaban en
rochelas
. Un tercer aspecto enmarca la configuración de estos espacios territoriales, dondeno existía control alguno de las autoridades coloniales, ya fuera por las condicionesgeográficas, que impedíande una u otra manera el acceso a estas regiones, o por la mismaresistencia que se perpetraba dentro de dichas comunidades. No eran más que estrategias desublevación contra el orden colonial.Las
rochelas
y quienes las habitaban-
arrochelados-
eran pobladores señalados con valoresnegativos, vistos como perpetradores de la ley colonial. Vale la pena destacar que ladiferenciación que se hacía...