Reseña Dominique Iogna-Prats Iglesia y soceidad en la Edad Media

Contreras Uribe, Simón

Universidad de Concepción
Asignatura: Temas de Historia Medieval y Moderna
Curso: IIIº / Año Académico: 2014
Profesor: Diego Mundaca Machuca


Dominique IOGNA-PRAT: Iglesia y sociedad en la Edad Media, Universidad Nacional Autónoma de México, México, 2010, 73 pp. ISBN: 978-607-02-1216-1.

La presente obra a analizar perteneciente a Dominique Iogna-Prat-Historiador francés cuya producción se centra en el estudio de Cluny, incluyendo la memoria de los orígenes y de la eclesiología de la abadía entre los siglos X y XII-, nos presenta una visión panorámica, detallada y crítica de lo que significó la Iglesia en la sociedad medieval, abarcando tanto, los orígenes del término, su connotación sagrada, funciones sociales de la Iglesia, evolución ideológica ydogmática y, deteniéndose minuciosamente, en la figura del monje como eje articulador de la vida social y religiosa. Su texto “Iglesia y Sociedad en la Edad Media” consiste en la transcripción de una serie de conferencias dadas a fines del año 2008, este producto historiográfico está dividido en tres grandes capítulos, los cuales en su conjunto tienen la intención de profundizar analíticamente elfenómeno eclesiástico y su incidencia en las prácticas sociales y, por ende, cotidianeidad de la realidad medieval. El primer capítulo, “La iglesia: Un edificio excepcional en el paisaje social”, el autor se centra en aproximar al lector a una definición histórica del espacio eclesiástico en donde, por convención, es considerado como el lugar donde Dios está más presente, sin embargo, pese a esto,el autos es enfático al mencionar que el significado de Iglesia no era unánime y no se encontraba exento de disputas ideológicas ya que existían movimientos heterodoxos que consideraban que no se podía encerrar la imagen de Dios en un edificio construido por manos impuras, desterrenalizando la divinidad y extendiendo su vigencia a todos los espacios del paisaje. Pese a ello, la tendencia que primófue la de considerar a la iglesia de occidente como un espacio único, cuyo carácter se sitúa entre la santidad y la sacralidad, considerándose, así, como el lugar intermediario entre los hombres y lo divino, lugar de articulación entre lo local con lo universal (reino de Dios). Es por ello que la religión católica, durante la edad media, sufrió una transformación significativa con respecto a susignificancia, es decir, pasó de ser una religión desterritorializada a otra en que los espacios destinados al encuentro espiritual estaba definido, haciendo la distinción entre fieles y herejes, entre un buen cristiano (quien asiste al lugar de culto) y quien está alejado de la religión, considerada como fuente de verdad en aquella época. Iogna-Prat nos expone que dicha valorización se encuentrarespaldada por la legalidad ya que se castiga toda infracción al asilo como “sacrilegio” ya que se cae en una ofensa al territorio sacro santo, es por ello que podemos advertir que es en el terreno del derecho civil donde se realiza el primer reconocimiento de la sacralidad de los lugares cristianos.
Otro “elemento” que otorga esta particular valorización a la religión y a su centro de culto, esla existencia de intermediarios, haciendo referencia a la mediación de los santos en materia divina, quienes son considerados como muertos excepcionales y cuyas reliquias y/o sus restos son distribuidos geográficamente para santificar y sacralizar el lugar e instaurar los “limites virtuales” donde el santo ejerce su dominio.
Como bien advertimos en apartados anteriores, la consolidación teórica dela religión católica y de las prácticas realizadas al interior de la Iglesia, contrajo diversos debates teológicos. Dominique Iogna-Prat nos expone los principales temas por los cuales eran impulsadas estas discusiones, en donde el primero tuvo cabida en la segunda mitad del siglo XI, enfrentándose así, el realismo eucarístico (quienes defendían que las especies consagradas -pan y vino- se...