Reseña el que no tranza no avanza

El que no tranza, no avanza
El cineasta mexicano Luis Estrada dirige una graciosa película que más allá de su formato cómico, muestra una realidad cruda que se vive en México: la corrupción en tornoal poder. En un remoto pueblo, San Pedro de los Saguaros, Juan Vargas entra a reemplazar a un alcalde decapitado por el propio pueblo después de robar dinero de las arcas municipales. Desde esemomento, el espectador asiste al ascenso (o descenso) de Vargas como político, desde su puesto de alcalde.
Vargas es la personificación del político mediocre mexicano. Sin embargo, al principio de lahistoria, Vargas se muestra como una persona correcta y humilde. No en vano, era él mismo el encargado de un basurero, además de ser un antiguo militante del PRI (Partido Revolucionario Institucional).Juan Vargas recibe la noticia más feliz de su vida: será el nuevo alcalde de San Pedro de los Saguaros. Radiante, comparte la buena nueva con su esposa, quien se llena de alegría por el progreso desu modesto esposo. Sin embargo, Juan Vargas no es para el PRI, y más particularmente para el Gobernador López, más que un pendejo útil, una herramienta necesaria para conservar el poder del partido.Así, Vargas es el símbolo de los políticos útiles, esos que sólo sirven para engordar el poder del partido y para ser peones, a la vez que creen ser figuras públicas que acumulan poder para sí mismos.Así, Vargas comienza creyendo que se ha ganado por mérito su nombramiento y su gobierno empieza regido por la buena fe, el respeto de las leyes y las banderas de la revolución y del presidente MiguelAlemán: acabar con la corrupción, modernidad, paz y justicia social. Pero poco a poco, con el pasar del tiempo, Vargas se deja enredar por el poder y la sed de éste. Vargas se pierde en el laberintohacia el progreso y en él sólo encuentra todo lo que supuestamente estaba evitando: corrupción, conflictos e injusticia social.
En el ascenso de Vargas como político corrupto hay un evento de...