resención Ortega y Gasset - Ideas para una historia de la filosofia

INTRODUCCIÓN
Ideas para una Historia de la Filosofía es un prólogo realizado por el filósofo español José Ortega y Gasset (Madrid 1883-1955) en 1942, posteriormente publicado en la obra de Émile Bréhier: Historia de la Filosofía de 1951. El texto contiene once apartados, al longo de los cuales se plantea la importancia de la historia de la filosofía. Ortega permítenos acceder a sus ideas sobrelas situaciones que, a lo largo de la historia, más influenciaron la Filosofía, despertando en el lector una profunda reflexión y cuestionamiento sobre este tema.
El pensamiento de Ortega se puede dividir en tres etapas: una primera etapa objetivista (1902-1914), una segunda etapa perspectivista (1914-1923) y una tercera etapa raciovitalista (1924-1955). En esta última etapa, también conocidacomo la razón vital, Ortega crea un método filosófico para superar la razón pura que prevalecía en esa época. Para Ortega el yo no existe separado de la realidad sino que hay una interrelación entre los dos. El yo necesita de las cosas para ser y existir. La realidad radical1 es esa relación del yo con las cosas, o sea, es la vida. Es en esta última etapa, de plena madurez del pensamiento del autor,en la que se encuadra el texto que vamos a comentar.

ANÁISIS DEL TEXTO
Ortega empieza el prólogo definiendo la obra de Bréhier como un texto tranquilo y claro. Alaba el autor con una característica poco frecuente, “rara erudición”2, es decir, “erudición del raro”3, por retratar “casi con la misma atención”4 las épocas de la historia de la filosofía que suelen considerarse más triunfantes ylas épocas poco iluminadas, dando a conocer obras valiosas poco documentadas5. Ortega critica así los términos de transición y decadencia asociados a estas épocas, y reflexiona sobre historicidad, afirmando que, en Historia, todo es transición, y que decadencia es apenas una parte del análisis. Para Ortega, el que se dedica al estudio de cualquier historia, pero en especial a la historia de lafilosofía, debe descubrir los rasgos positivos, aun en las épocas más difíciles.
Ortega considera que la historia no se puede hacer sólo del pensamiento de las grandes figuras, pues “la montaña reclama el valle”6. La historia de la filosofía no puede ser historia si no “llena esos vacíos de conocimiento”, esos abismos entre épocas de pensamiento más triunfantes. El autor justifica su opiniónanterior con el ejemplo de algunas grandes filosofías de “decadencia” que se siguieron a la filosofía de Aristóteles, como el estoicismo y el escepticismo. Esas filosofías “más torpes”7, que triunfaron sobre el idealismo platónico-aristotélico, podrían tener enorme importancia en la historia de la filosofía, pero sólo nos llega una parte de la realidad, “los rasgos más similares a nuestro actualpensamiento”8. Ortega concluye así la importancia que la noción errónea de “época de transición y decadencia” tiene en la construcción de la historia de la filosofía.
Después de comentar “las épocas deslucidas”9, Ortega, consciente de que “nuestra vida es el intérprete universal”10, introdúcenos en el “sentido histórico”11 de la Filosofía, con el objetivo de “hacernos verosímiles la vida de los otroshombres”12. El autor refiere que a partir de nuestra vida intentamos entender la vida del otro, con todo lo que tiene de distinta y extraña a la nuestra. Así, la historia trata de hacer con que todo ser humano sea un alter ego13, con un yo y un tú. Para hacer el camino desde nuestra vida hacia la de los demás, preséntanos cuatro etapas del pensamiento: 1ª - las vidas de los demás influyen en la mía yla mía tiendo a proyectarla sobre los demás; 2ª - descubro que el otro es distinto de mí14; 3ª - ahora que soy consciente de mi ser como distinto del otro tú, intento asimilarlo como un “yo que es otro yo”15, a esto se llama la comprensión del prójimo; 4ª - así, el prójimo transformase en un tu asimilado a mí yo. De esta forma, el autor va a aplicar estos pasos a la historia de las ideas. El...