Reseña

El texto de Raúl Fornet-Betancourt, “Supuestos filosóficos del diálogo intercultural” (que es el capítulo segundo de su libro Transformación intercultural de la filosofía. Ejercicios teóricos y prácticos de filosofía intercultural desde Latinoamerica en el contexto de la globalización) está conformado por tres partes. Las dos primeras constituyen una introducción, por cierto extensa, mientras queen la tercera se explica el asunto del texto, esto es, los supuestos o posibles principios filosóficos para realizar un diálogo entre las culturas.
Así pues, en la primera parte, el autor expresa estar en desacuerdo con Domingo F. Sarmiento para quien la “civilización”, que se refiere al modelo imperante de la cultura occidental cuya etapa de desarrollo última es la globalización delneoliberalismo, es la salida del estado de barbarie entendido como la condición indigena y precolonial en la que aún no se abraza la occidentalización de la vida. Fornet-Betancourt se resiste a esta distinción conceptual, debido a que, según él, la barbarie no es anterior a la “civilización” ya que en ésta se produce la primera, es decir, que la mundialización del modelo cultural de Europa ha causado untipo de barbarie que se evidencia, por ejemplo, en la destrucción ecológica, el racismo y la exclusión social. Para menguar esta crisis en la que deviene esa occidentalización cultural del mundo, Fornet-Betancourt propone el diálogo intercultural crítico.
Ahora bien, para entender en qué consistiría dicho diálogo, el autor entra a explicar las dos dialécticas que se dan al interior de toda culturaoriginal a la que en principio todo individuo pertenece. La primera de ellas consiste en el antagonismo que se da en el individuo entre determinación y libertad, lo que respectivamente consiste en la influencia que la cultura ejerce en el individuo, y en la manera en la que éste se hace consciente, mediante la reflexión crítica, de esa influencia para establecer si le otorga o no sentido, si optapor salir o permanecer en ella. Después de esta tensión dialéctica subjetiva, y que el autor interpreta desde el pensamiento de Jean Paul Sartre, se expone la dialéctica entre opresión y liberación que viven las diversas tradiciones que conforman una misma cultura. Esta segunda tensión, que el autor intrepreta teórica y metodológicamente desde la filosofía de Enrique Dussel (Principio - Liberador)y que está en profunda relación con la anterior, significa que al individuo reflexionar sobre su cultura puede comunicar esa reflexión a otros en un acto de solidaridad, con el propósito de hacer conscientes a otros sobre la opresión o sentido que les otorga la tradición que comparten, para encontrar conjuntamente la liberación en el caso que en el que se sientan oprimidos.
En la segunda parteFornet-Betancourt entra a explicar el sentido, el carácter, finalidad y esperanza del diálogo intercultural como proyecto opuesto a la globalización neoliberal. Al respecto el autor afirma que la interculturalidad es una manera de cooperación y comunicación solidaria con la que se puede reorganizar el mundo, para lo cual es necesario que las personas relativicen su propia cultura y entren en unaapertura en la que puedan conocer otras tradiciones para acoger al otro con respeto y tolerancia. De esto se sigue la co-autonomía de los individuos y la co-soberanía de las culturas que llevan a que un nuevo orden del mundo se haga desde abajo, es decir, desde la participación de todas las culturas y no desde un modelo imperante (desde arriba). Esta posibilidad de construir un nuevo orden mundialrepresenta una esperanza ante la barbarie.
Finalmente, en la tercera parte Fornet-Betancourt explica cuatro supuestos filosóficos para llevar a cabo el diálogo entre las diferentes culturas. En primera instancia, está la concepción del hombre como un universal singular que consiste en que la cultura (lo universal) se hace presente en la persona (lo singular) cuando ésta se la apropia y la vive....