resistencia indigena
Los indígenas, por su parte, no experimentaron la dominación colonial de manera pasiva. Por el contrario, aprendieron a desarrollarnumerosas prácticas de resistencia social y cultural.
El fenómeno de la resistencia adoptó en la mayoría de ocasiones formas no violentas. El fo asterismo y la reivindicación étnicadentro de las haciendas, por ejemplo, fueron manifestaciones de resistencia de este tipo.
No obstante, el maltrato, la explotación y la violación de normas consuetudinariasprovocaron la protesta
colectiva.
El conjunto de sublevaciones expresó de un lado, un cuadro de abusos de las autoridades civiles y religiosas (corregidores, curas párrocos,terratenientes y propietarios de obrajes) y de otro, la reacción indígena contra medidas vinculadas con las reformas borbónicas.
Como sabemos estas medidas buscaban ejerceruna presión fiscal que elevar a los ingresos para la Corona.
Entre esas medidas estaban las “numeraciones” (censos) de indígenas en comunidades y los intentos de incluir a lapoblación forastera.
Los pueblos indios, pese a la profunda y duradera destrucción provocada por la conquista y pese al intenso proceso de aculturación a que se les somete,conservan cierta capacidad de resistencia y desde el inicio de la colonización expresan su protesta y su rechazo a la dominación colonial.
Los mecanismos de defensa fueronvariados, desde la resistencia pasiva o la simple huida hasta la rebelión armada, o también la adaptación, siquiera aparente, fórmula escogida, por ejemplo, por los indígenas de lapenínsula de Santa Elena (Ecuador), que adoptan muy pronto la lengua y la indumentaria españolas pero mantienen sus costumbres y una relativa independencia en sus pueblos.
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