Respeto a la autonomía del paciente

TEMA DE REFERENCIA: El consentimiento informado.
TÍTULO DE LA PONENCIA: “El consentimiento informado de los menores maduros”.
AUTORES: Dr. Oscar Gabriel Cisano y Dr. Ignacio Carlos Figueroa.

I.- Los niños y adolescentes son Sujetos de Derecho:
Los Siglos XX y XXI han visto a la legislación mundial llegar a niveles excelentes en su búsqueda por el respeto por la Persona Humana. Y elreconocimiento de los derechos de los niños y adolescentes no es una excepción. En particular con referencia a este último grupo etario, la consagración plena de los Derechos Humanos ha conducido a la elaboración del concepto de “menor maduro”, el cual puede sintetizarse en el precepto de que debe tenerse en cuenta la voluntad de todo niño o adolescente que pueda formarse un juicio en el camporespectivo. Argentina se ha encolumnado decididamente en esta tendencia.
La Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó en 1989 la Convención Internacional de los Derechos del Niño, que Argentina incorporó a su legislación por Ley 23.849. En 1994 se produjo la Reforma de la Constitución Nacional que elevó a esta Convención a la jerarquía constitucional (Art. 75, Inc. 22). En 2005 se dictó la Ley 26.061,con su Decreto Reglamentario 415/2006, que prevé la aplicación de la Convención de los Derechos del Niño, ampliando los mínimos que la misma contempla, mientras normas similares se han ido dictando sucesivamente en las Provincias y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Finalmente, en 2009, se dictó la Ley 26.529, que reconoce a los niños y adolescentes maduros la posibilidad de ejercer derechoscomo pacientes con los alcances de la legislación vigente.

2.- El interés superior del niño exige el respeto de todos sus derechos:
El eje fundamental que ha de regir el respeto por los derechos de los niños y adolescentes es lo que la Convención denomina “interés superior del niño”.
El Art. 3 de la Convención ordena que “en todas las medidas concernientes a los niños que tomen lasinstituciones públicas o privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los órganos legislativos, una consideración primordial a que se atenderá será el interés superior del niño.”
Ahora bien, es menester precisar el concepto de “interés superior del niño” a fin de que sea el norte a seguir por todos los agentes estatales o no que interactúen con los menores. Aunque laConvención no lo expone expresamente, de la interpretación armónica de su articulado puede fácilmente inferirse que no se trata del reconocimiento de algún derecho en particular o preponderante, como podría ser, el derecho a la vida. Más bien, implica asegurar que el niño logre la satisfacción de todos los derechos que le asisten, incluido el respeto por su dignidad como persona y libertad.
Por esoaparece como acertada la definición de la Ley 26.061, en su Art. 3, que dice que se entiende por interés superior del niño y adolescente “la máxima satisfacción, integral y simultánea de los derechos y garantías reconocidos en esta ley”.
Profundizando en esta idea, tanto la Convención como la citada Ley, contemplan entre los derechos y garantías reconocidos a los niños, el respeto de su condiciónde sujetos de derecho, su derecho a ser oídos, que su opinión sea tenida en cuenta, en función de su edad, grado de madurez y capacidad de discernimiento.
Como ejemplo del respeto a la dignidad como persona de los menores, el Art. 14 de la Convención estatuye que los Estados Partes respetarán el derecho del niño “a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión”.
La clave está, portanto, en adoptar en cualquier campo en general, y en la relación “médico-paciente” en particular, todas las medidas que aseguren que los niños tengan la posibilidad de ejercer todos sus derechos.

3.- El “menor maduro” tiene derechos como paciente:
Ahora bien, está fuera de discusión que los niños y adolescentes van alcanzando paulatinamente niveles cada vez más elevados de madurez y aptitud...