Responsabilidad social

Responsabilidad social y concordia

Julio Gilberto Muñiz Caparó

En plena crisis minera, surge la necesidad de recordar que la comunidad peruana, en su conjunto, y lasempresas, en particular, son agentes solidarios de la responsabilidad social, elemento vital para encontrar puntos de coincidencia en un camino sembrado de dificultades en el que transita el gobierno delpresidente Humala. Este, a su vez, está en la obligación de ejercer su tarea como rector del equilibrio social de la nación.
En efecto, el país reconoce que la minería aportasignificativamente a la economía, pero también es consciente de que los empresarios, en su afán de lucrar, han terminado destruyendo el ecosistema y han puesto en riesgo la salud y la tranquilidad social.Esa es la modernidad, como diría J.I. González Faus: *ha construido un mundo donde sin contemplaciones se almacenan armas capaces de destruir el planeta, pero no hace el menor esfuerzo por almacenaralimentos que pudieran evitar que cada año mueran de hambre cientos de millones de seres humanos*
El Perú se enfrenta a diario con problemas crecientes que no le permiten enmendarrumbos por muchas circunstancias: la ambición individualista de quienes lo quieren todo sin pensar en los demás y como secuela, se produce un desorden social que perjudica severamente a los interesesde la comunidad. A esto se agrega la ausencia de principios y valores, la violencia, el narcotráfico, la inseguridad, la pobreza, el hambre, el analfabetismo, la prostitución, la inequidad. Todosellos, entre otros, son flagelos incrustados en el corazón social, sin aparente solución a breve plazo.
Volviendo al tema minero, se hace indispensable poner un candado normativoque en forma definida e integral aliente la inversión sin perder de vista un total y definitivo apoyo social a los pobladores de las zonas mineras, quienes, además, requieren estar debidamente...