Restauradra y su caudillo
Para un tachirense como el que esto escribe, vinculado por los nexos de la sangre y los afectos entrañables del hogar a algunos de los protagonistas del drama venezolano que tuvo como punto inicial el 23 de mayo de 1899, es realmente escabroso y difícil, enfocar con la imparcialidad que el terna requiere, lo que representaron para el Táchira lafiguración de sus hijos en el primer plano de la vida nacional y las derivaciones inevitables del hecho que se prolongaron para la República hasta diciembre de 1935, en que feneció con el general Juan Vicente Gómez un sistema de gobierno que tuvo los contornos de un período trágico y doloroso para Venezuela, y que más tarde, afortunadamente, pudo enrumbarse hacia mejores destinos, precisamente bajo ladirección de un ilustre conterráneo, el señor general Eleazar López Contreras, el reverso de sus dos antecesores en el mando supremo del país.
Además, por lo que a nosotros respecta, porque llevamos en nuestras vidas el sedimento de amargura y de los sufrimientos que malograron nuestra juventud, en la que se mezclan los recuerdos de seres amados a los que la muerte recogió en sus brazos; porquehubimos de caer en incomprensibles desgracias, podría alguien creer que nos excedemos en las apreciaciones y que obramos impelidos por bastardos sentimientos al referirnos, como lo hacemos, a uno de los más dolorosos renglones del pasado venezolano.
En la ya histórica fecha de la insurgencia armada contra el régimen presidido por el general Ignacio Andrade, en la meritoria ciudad de Lobatera, que ennuestro caso concreto es el lugar en donde nacieron los que nos dieron el ser y constituyeron las columnas del humilde hogar que la muerte destruyó implacablemente, estuvo entre los dirigentes del movimiento capitaneado por el general Cipriano Castro, uno de los que hicieron toda la campaña restauradora hasta Caracas y gozó del aprecio y de la distinción del caudillo restaurador. Y nombramos a JuanE. Figueroa. Esta breve relación la hemos creído previa para que se conozcan cuáles son los nexos del autor con los protagonistas del drama que se prolongó en el escenario venezolano por veintisiete años. Juan E. Figueroa fue nuestro tío por la rama paterna.
El 12 de octubre de 1858 nacía en jurisdicción del antiguo pueblo de San Pedro de Capacho el niño que fue bautizado el 21 del mismo mes deoctubre con el nombre de José Cipriano Castro, hijo legítimo de don José del Carmen Castro y doña Pelagia Ruiz, y cuya partida eclesiástica de nacimiento reposa en el archivo de la Iglesia Parroquial de Independencia, capital del Distrito Capacho. Esa partida la publicó el historiador J. N. Contreras Serrano en el número 14 del Boletín del Centro de Historia del Táchira, correspondiente a febrerode 1956, en su trabajo "Datos para una biografía del general Cipriano Castro" (1).
Fue el futuro restaurador el tercero de los diez hijos del matrimonio Castro-Ruiz. Su niñez y su adolescencia tuvieron como escenario, la comarca tachirense de Capacho, en la cual la vida tenía contornos patriarcales y en donde el cultivo de la tierra providente constituía la ocupación primordial de las genteslaboriosas que la habitaban, practicantes de la Religión Católica y conservadoras de las más valiosas tradiciones hogareñas. Entre los maestros que contribuyeron a su formación intelectual, se encuentran don Vicente Durán, don Juan de Dios Bustamante, el doctor Federico Bazó y los profesores del Seminario Conciliar de Nueva Pamplona, Colombia, en donde el joven Castro completó sus estudios, pararegresar a Capacho a ejercer funciones de comerciante al por menor. Actor en los trágicos sucesos del terremoto del 18 de mayo de 1875, fue de los fundadores del nuevo pueblo de San Pedro de Capacho, al lado de su padre y de su hermano Celestino Castro (2). Para los años de 1878 a 1880, estuvo radicado en San Cristóbal como dependiente de la casa alemana Van Dissel, Thíes & Compañía, la antigua...
Regístrate para leer el documento completo.