Resumen carta dominicae cenae
Del Sumo Pontífice Juan Pablo II a los obispos de la Iglesia sobre el misterio y el culto de la Eucaristía
1. Os dirijo a vosotros, para el próximo Jueves Santo, una carta que tiene una relación inmediata con la que habéis recibido el año pasado, en la misma ocasión, junto con la Carta para los sacerdotes.
I EL MISTERIO EUCARÍSTICO EN LA VIDA DE LA IGLESIA Y DEL SACERDOTEEucaristía y sacerdocio
2. La Carta presente que dirijo a vosotros, está también en estrecha relación con el misterio del Jueves Santo y asimismo con el sacerdocio. Los directos destinatarios de esta Carta sois vosotros, Obispos de la Iglesia; junto con vosotros, todos los Sacerdotes; y, según su orden, también los Diáconos. Ya que, están en relación muy estrecha con la Eucaristía. Esta es laprincipal y central razón de ser del Sacramento del sacerdocio. Estamos unidos de manera singular y excepcional a la Eucaristía. Somos, en cierto sentido, «por ella» y «para ella».
Nuestro culto eucarístico, es como una corriente vivificante, que une nuestro sacerdocio ministerial o jerárquico al sacerdocio común de los fieles y lo presenta en su dimensión vertical y con su valor central. Elsacerdote ejerce su misión principal y se manifiesta en toda su plenitud celebrando la Eucaristía.
Culto del misterio eucarístico
3. El culto está dirigido a Dios Padre por medio de Jesucristo en el Espíritu Santo. La aclamación litúrgica: «Anunciamos tu muerte» nos hace recordar el momento de entrega suprema y de abandono total de sí mismo en la última cena. Al proclamar a la vez su resurrección,abrazamos en el mismo acto de veneración a Cristo resucitado y glorificado «a la derecha del Padre»,
Esta adoración está compenetrada con la grandeza de esa Muerte Humana
El misterio eucarístico ha sido instituido por amor y nos hace presente sacramentalmente a Cristo, es digno de acción de gracias y de culto. Este culto debe manifestarse en todo encuentro nuestro con el Santísimo Sacramento,tanto cuando visitamos las iglesias como cuando las sagradas Especies son llevadas o administradas a los enfermos.
La adoración a Cristo en este sacramento de amor debe encontrar expresión en diversas formas de devoción eucarística: plegarias personales ante el Santísimo, horas de adoración, exposiciones breves, prolongadas, anuales (las cuarenta horas), bendiciones eucarísticas, procesioneseucarísticas, Congresos eucarísticos 13 . A este respecto merece una mención particular la solemnidad del «Corpus Christi» como acto de culto público tributado a Cristo presente en la Eucaristía, establecida por mi Predecesor Urbano IV en recuerdo de la institución de este gran Misterio 14 . Todo ello corresponde a los principios generales y a las normas particulares existentes desde hace tiempo yformuladas de nuevo durante o después del Concilio Vaticano II 15 .
Eucaristía e Iglesia
4. Gracias al Concilio nos hemos dado cuenta, con mayor claridad, de esta verdad: como la Iglesia «hace la Eucaristía» así «la Eucaristía construye» la Iglesia 16 ; esta verdad está estrechamente unida al misterio del Jueves Santo. La Iglesia ha sido fundada, en cuanto comunidad nueva del Pueblo de Dios, sobre lacomunidad apostólica de los Doce que, en la última Cena, han participado del Cuerpo y de la Sangre del Señor bajo las especies del pan y del vino. Cristo les había dicho: «tomad y comed» ... «tomad y bebed». Y ellos, obedeciendo este mandato, han entrado por primera vez en comunión sacramental con el Hijo de Dios, comunión que es prenda de vida eterna. Desde aquel momento hasta el fin de lossiglos, la Iglesia se construye mediante la misma comunión con el Hijo de Dios, que es prenda de la Pascua eterna.
Como maestros y guardianes de la verdad salvífica de la Eucaristía, debemos, queridos y venerados Hermanos en el Episcopado, guardar siempre y en todas partes este significado y esta dimensión del encuentro sacramental y de la intimidad con Cristo. Ellos constituyen, en efecto, la...
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