Resumen Del Libro Desfile De Modelos
En este capítulo se trata la inteligencia humana, se explica que el ser humano es capaz de usar lo que tiene y lo que no tiene para garantizar su bienestar. Ya sabemos que lainteligencia es una caja de sorpresas. Para bien o para mal. Pero ella misma es consciente de su doble posibilidad. Y esa conciencia le permite ejercer un eficaz autocontrol sobre sus propios actos. Lasgrandes tradiciones culturales de la humanidad, desde Confucio y Sócrates, han entregado ese control de calidad a dos funciones intelectuales de máximo rango: la prudencia y la conciencia moral. Laconciencia de nuestra libertad nos lleva a gestionar nuestra propia vida. Además de esa acepción psicológica, existe para la conciencia otra acepción fundamental, que cualquier diccionario define como lacapacidad de reconocer el bien que debemos hacer y el mal que debemos evitar; es exigencia de nosotros a nosotros mismos.
La conciencia es fruto de la educación, como también lo son la amistad, eltrabajo y el respeto a las leyes. Pero se trata de frutos necesarios, inevitables: debemos obrar en conciencia, trabajar, respetar las leyes y tener amigos porque, de lo contrario, no obramos comohombres.
También se explica que el ser humano es capaz de prever, prevenir, precaver y proveer y de esto se deriva la prudencia: ver previamente y adelantarse a los acontecimientos, medir lasconsecuencias antes de obrar, verlas venir. A La prudencia sólo se llega por la experiencia. Y el joven no tiene experiencia, porque ésta se adquiere con la edad.
Si la prudencia es necesaria paracualquier hombre, lo es especialmente en el arte de gobierno, por ser empresa de la que dependen muchas vidas. Un buen control de calidad obliga a jugar limpio, tanto en la elección del fin como en el terrenode los medios. El pensamiento clásico advierte que la reflexión al servicio del mal no es prudencia, pues no se puede perseguir un fin bueno por un camino malo, ni seguir un camino inteligente para...
Regístrate para leer el documento completo.