resumen Ezpeleta Escuela y maestros
LA DOBLE CALIDAD DEL DOCENTE: PROFESIONAL Y ASALARIADO
En este período neoliberal, marcado por la industrialización y que llega al estancamiento y crisis, el país ha vivido procesos de urbanización, cambios demográficos, de ampliación y retracción de servicios estatales, el acceso de nuevos sectoressociales al trabajo y a la educación (sobre todo mujeres), entre otros, han cambiado su configuración económico-social.
El elevado índice de cobertura en la educ. primaria es uno de los signos más visibles en la expansión del sistema. Mientras por un lado se logra garantizar el ingreso de sectores históricamente excluídos, la escuela se incapaz de retenerlos.
El currículo, los métodos, la relacióneducativa, teniendo en cuenta las características sociales de alumnos y docentes, sintetizan las cuestiones que suscitan atención.
La inclusión masiva de niños provenientes de sectores populares supuso una mutación en la composición del alumnado. Los maestros debieron enfrentarse a un nuevo interlocutor histórico, portador de un lenguaje y cultura ajenos a los propios de la escuela. Esta situaciónviolentó las formas tradicionales vigentes de la escuela, su organización, el currículo, sobre todo el trabajo docente. Los ritmos de la escuela se alteraron, pero el modelo institucional y las formas de su organización permanecieron incuestionables.
Los maestros debieron forzar sus tradicionales estilos de trabajo e incorporar la nueva realidad social de alumnos y escuela, sin tener unapreparación previa para ello.
A la precaria infraestructura, a la desestabilizada imagen cultural que el docente tenía del alumno ideal, se sumó otro hecho: educar a más niños y en menos tiempo en las zonas urbanas o incorporar más grados para un solo maestro en las zonas rurales con las consecuencias pedagógicas y laborales que ello acarrea.
La expansión del nivel primario significó la ampliación deun vasto mercado de trabajo, producto del mayor acceso al secundario y terciario y de los procesos de urbanización. Esta opción laboral, significa para muchos la salida para compensar las necesidades económicas particulares o para subsistir mientras se preparan otros caminos profesionales. La devaluación de los sueldos del sector alimenta ese sentido de la funcionalidad mientras la ausencia deincentivos reales debilita la profesionalización.
La masificación del magisterio, su heterogénea y cambiante composición social, el lugar adjudicado a la docencia en los proyectos de vida, configuran nuevas configuraciones que deben tomarse en cuenta.
Pareciera que el quehacer docente ha sufrido transformaciones como consecuencia de la expansión del servicio, en tanto que la administraciónpersiste en su antigua tendencia de tratar al maestro y a la estructura de la escuela como elementos constantes e invariables.
Si bien es cierto que el aula conforma el ámbito por excelencia de la realización profesional y educativa, no es menos cierto que la hegemonía del aula en la vida de la escuela puede verse fisurada por las prácticas que impone el mismo movimiento institucional. Es pertinentepreguntarse cómo la escuela facilita o interfiere en el quehacer pedagógico del aula. Además institución especializada en la enseñanza, la escuela es un lugar de trabajo. Es y forma parte de una estructura administrativa. La administración impone e implanta controles.
La escuela es una estructura laboral. El maestro se sitúa en ella cuando ingresa a un puesto según la normativa y las jerarquíasque definen un lugar de trabajo. allí debe realizar tareas específicas por las cuales , aparte del reconocimiento, percibe una remuneración. Solo a partir de esta inclusión, el maestro podrá ejercer su oficio con toda su idoneidad, entrega, interés y motivación. Las dimensiones técnicas, administrativas y laboral, articuladas en términos formales y comunes para todos los docentes, encuentran su...
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