Resumen PARMENO

Don Ramón había criado a María y a Luis en Villazúl, un encanto de pueblo que sólo existe en la fantasía de "Parmeno". Villazúl está considerado como una especie de antesala del cielo por sus habitantes. Por su simbolismo, "Villa azul", es un dechado de las fantasías más sentimentales que existan, más románticas; de modo y manera que su mero recuerdo enamora a quienes lo frecuentaron. Infundeverdaderamente los más placenteros, deleitosos sentimientos, hijos del ineludible cariño que une a los amantes y descasa a los cónyuges. Según el invento artístico - literario del dramaturgo, Villazúl es un pueblo de Andalucía. María se quedó huérfana a la muerte de sus padres y don Ramón se hizo su padre a la muerte de sus padres y don Ramón se hizo su adoptivo. Les crió juntos, María y Luis, susobrino. Cuando apenas llegó a la edad de la pubertad, don Ramón facilitó su matrimonio con don Andrés, hermano de él. Don Andrés, pudiente hombre de negocios, empresario de renombre, vio crecer 2 LÓPEZ PINILLOS, José: El vencedor de sí mismo. Op. cit., p. 1. 229 a María en Villazúl y pese a su edad muy avanzada, ya que era ya sesentón, pudo disfrutar el amor de la jovencísima María. Pero por motivode negocios, tanto don Ramón como don Andrés se trasladaron a un mismo centro urbano. Como es lógico imaginarlo, don Ramón se fue con María y con su sobrino Luis. Claro está, María no se había casado todavía con don Andrés. En este Centro Urbano es donde se casan María y don Andrés. Luis emprende una carrera de Leyes y la acaba con éxito. Pero no trabaja como hombre de Leyes, sino que se hacesocio de don Andrés en sus empresas, con el consentimiento de su tío don Ramón. Este empleo hace que María y Luis estén en contacto permanente. Así es como alguna que otra vez se pierden en evocaciones románticas, casi idílicas, en torno a Villazúl donde fueron criados. Los recuerdos les unen a Villazúl y les enamoran. Un día, don Andrés se sobrecoge de celos al encontrar a su mujer mirando de formasimpática a Luis y viceversa. Don Andrés no puede resistirse a sospechar que María y Luis son amantes, y la idea de que son dos jóvenes de la misma edad tiende a convencerle más. Informa a su hermano don Ramón de la relación sospechada, pero éste intenta quitarle de encima tal consideración, dándole a entender que lo que es cariño fraternal, no se debe tomar por cariño de amantes. Sus hijoscrecieron juntos y están unidos por un cariño fraternal, otro, no. Entre chanzas y veras, don Andrés se lo acepta. Se pone al acecho. Si llegara a convencerse de sus sospechas, resultaría deshonrado y aquello no sería sino un desastre familiar. El escepticismo le invade. Este estado anímico y el nerviosismo que caracterizan a don Andrés le llevan a despedir a su cochero. Tomás tan pronto como su criadole informa de que Tomás está pegando de forma inhumana a Felisa, su mujer. Luis y Julio, otro socio de don Andrés, le reprochan lo de despedir a su cochero. Le recuerdan que el cochero Tomás se había criado en una cuadra, por eso es por lo que crece de educación y no sabe reprimir sus instintos. No ha logrado aprender el arte elemental de la hipocresía, en el que todo­ ellos s­n maestros, y lesenseña su alma sin tapujos. Además, según Luis y su compañero Julio, aunque el cochero Tomás es primitivo, dice tantas gracias como el diputado Orofiel; y eso que el diputado Orofiel no es ni cochero, ni borracho, como Tomás. Para ellos, el diputado Orofiel es la "flor y nata 230 de la ridiculez." Cada vez que Luis y María se encuentran, se enamoran de Villazúl en el recuerdo y piensan que seríanmuy felices si hicieran una excursión allí. El proyecto le parece fenomenal a su padre y los tres preparan el viaje. En el fondo, María y Luis están engañando a su padre, puesto que su verdadero propósito es pasarlo bien los dos en Villazúl, lejos de Andrés. Por otro lado, Luis se hace poco agradable a su mujer Emilia y ella se queja del comportamiento insólito de su marido. Luis lleva veinte días...