resumen
La hipocresía es el arte de amordazar la dignidad. Los hombres rebajados por la hipocresía viven si ensueño. Ninguna fe impulsa a los hipócritas; no sospechan el valor de las creenciasrectilineas. Esquivan la responsabilidad de sus acciones, son audaces en la traicion y timidos en la lealtad. Cierran todas las rendijas de su espiritu por donde podria asomar desnuda su personalidad,sin el ropaje social de la mentira. El hipócrita suele aventajarse de su virtud fingida, mucho ams que le verdadero virtuoso.
Las mediocracias de todos los tiempos son enemigas del hombre virtuoso:prefieren el honesto y lo encumbran como ejemplo. La virtud eleva sobre la moral corriente; implica cierta aristocracia del corazon, propia del talento moral; el virtuoso se anticipa a alguna forma deperfeccion futura y le sacrifica los automatismos consolidados por el habito. El honesto, en cambio, es pasivo aunque permanece por debajo de quien practica actifvamente alguna virtud y orienta su vidahacia algun ideal limitandose a respetar los prejuicios que lo asfixian. Admirar al hombre honesto es rebajarse; adorarlo es envilecerse.
Los tranfugas de la moral son rebeldes a la domesticacion;desprecian la presente cobardia de Tartufo. Ignoran su equilibrismo, no saben simular, agraden los principios consagrados; y como la sociedad no puede tolerarlos sin comprometer su propia existencia,ellos tienden sus guerrillas contra ese mismo orden de cosas cuya custodia obsesiona a los mediocres.
La honestidad es una imitación; la virtud es una originalidad. Ser honesto significa someterse alas convenciones corrientes; ser virtuoso significa a menudo ir contra ellas. La evolucion de las virtudes depende de todos los factores morales e intelectuales. El cerebro suele anticiparse al corazonpero nuestros sentimiento influyen mas intensamente que nuestras ideas de la formación de los criterio morales. La virtud es una tension real hacia lo que se coincibe como perfeccion ideal. Cada...
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