Revista Filosof A Hoy N 2 Cual Es La Ley Del Deseo P Gs 46 Y 47

SOCIEDAD

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El ser humano es dichoso cuando alcanza su objetivo, y miserable cuando los sueños se frustran. ■
Este
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Conscientes de la fuerza del apetito del alma, exacerbado por una sociedad consumista, los filósofos han

S

er guapos, eternamente jóvenes, felices, tener dinero
una casa una pareja que
nos entienda. Nuestros deseos son infinitos. Muchos filósofos
lo han analizado. ¿Sabrán ellosdecir cuál es la ley del deseo? ¿Podrán
sus enseñanzas ayudar al ser humano a recobrar la paz anhelada?
Para el filósofo suizo Rousseau,
el hombre es limitado, pero ávido;
lo que no puede obtener, lo suple
creando un mundo de ilusiones, "el
único digno de ser habitado". I ras
personas sufren por no alcanzar lo
que anhelan, pero "vivir sin dolor
no es propio del hombre; vivir así
es estar muerto",concluye. El deseo es la fuerza vital que nos ayuda
a romper las limitaciones naturales, sociales, culturales, religiosas
o personales. A nivel colectivo, el
deseo ha llevado a la humanidad
a superarse; las revoluciones, los
inventos tecnológicos, los avances
morales y sociales son prueba de
ello. En el plano individual, el deseo impulsa a vencer límites, como
ocurre con el físico inglés StephenHawking: su inmovilidad casi total
no le ha impedido desarrollar sus
investigaciones científicas.
El ejemplo es válido cuando el
deseo propulsa hacia lo mejor,
pero cuando el fi-acaso se reitera,
sumiendo a las personas en un estado de melancolía, el mayor deseo
es recobrar la paz interior.
SOLO LA MUERTE MATA EL DESEO
Buda sostiene que "toda la vida es

sufrimiento y la causa del sufrimiento es eldeseo"; eliminarlo requiere disciplina. La meditación,
junto con otras prácticas, ayuda a
calmar la mente, pero no a suprimir el deseo como tal. El filósofo
romántico Schopenhauer asegura
incluso que no querer desear es un
deseo en sí. Además, el anhelo satisfecho "da lugar inmediatamente
a otro nuevo". El sistema económico actual estimula esta dinámica,
creando nuevas necesidades y ansias; así,la gente aspira a tener un
trabajo mejor, unas vacaciones ideales, el último modelo de coche...
La literatura ha reflejado esta
tendencia tan humana en innumerables ocasiones. Por ejemplo, en
la obra de ZorrillaDon Juan Tenorio
multiplica las conquistas, sin lograr
nunca calmar su sed. ¿Conseguirá
en algún momento la felicidad? El
pensador alemán contestaría negativamente: "Mientras estemos so46Filosofía lloy

"¡Ay de aquel que no tiene
nada que desear! Lo que el
hombre no puede obtener
lo suple con la imaginación,
creando un mundo de
ilusiones". ROUSSEAU
El banquete,
de Platón, publicado
por 'caria.

metidos al impulso del deseo, a las
esperanzas y a los temores que genera, no conoceremos ni dicha duradera ni descanso". Para Schopenhauer, solo la muerte puede matar
el afán. El filósofoRené Descartes
propone, en cambio, moderar los
apetitos mediante una sencilla receta: aspirar a lo posible.
TRES TIPOS DE DESEO

Ser realistas es razonable, pero ¿cómo distinguir lo posible -aunque
difícil- de lo inalcanzable? Por un
lado, Descartes mismo se quedaría
asombrado: Leonardo Da Vinci soñó con volar y siglos más tarde se
inventó el avión. Pero también es
cierto que los deseos irrealesmuchas veces quedan en meras ilusiones; fue el caso de los alquimistas,
que durante siglos intentaron en
balde topar con la piedra filosofal.
En un ámbito más cotidiano, muchas personas se afanan a fuerza
de dietas y ejercicio en conseguir
un cuerpo ideal. Cuando la decepción se repite, ¿no sería más sensato desistir y cambiar la percepción
que tenemos del propio cuerpo?
Sueños, esperanza,desánimo...
se mezclan a diario. El equilibrio
entre éxito y frustración resulta
complicado; para alcanzar su justa
medida, quizá ha llegado el momento de pedir auxilio a Epicuro.

(upado, de Caravaggio (1602). Staatlidie Museen, en Berlín (Alemania

EN MI OPINIÓN

El deseo: entre la abundancia y la po

Desear viene de 'astro' (cuerpo en el
espacio sideral). La partícula 'de' indica
la ausencia: de-sear...