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1.

Sol y Luna

Corría por un bosque, no sabía hacía donde me dirigía. Estaba asustada, era de noche. Me caí al tropezar con un tronco de un gran árbol. En el suelo había un colgante, con un sol y una luna. Parecía que era lo que buscaba. Lo cogí entre mis dedos y me lo puse en el cuello. En ese momento empezó a amanecer y los pájaros volaron de los árboles.

Me desperté gritando ysudando. Me toque el cuello en busca del raro colgante, para saber si seguía soñando o estaba despierta. El colgante no estaba, así que todo fue un sueño.

En el colegio, yo estaba dibujando el colgante que había soñado, pero al sonar la campana entró por la puerta el profesor de matemáticas y escondí debajo de la mesa el dibujo. Ese día no podía atender a ninguna materia, porque no dejaba de pensaren otra cosa en vez del colgante. Sin darme cuenta sonó la campana del recreo. Yo me sorprendí lo rápido que pasaron las horas. Así que al salir paré a Katy, mi compañera, para decirle que cuando entre en la clase me escriba en un papel los deberes. En el recreo busque a Ema, una de mis mejores amigas. Aquel día llevaba puesto unos vaqueros blancos, un jersey rosa y unos deportes negros. Se quedomirándome la ropa que llevaba aquél día, ella era algo parecida a una especialista en vestir. Yo llevaba mis pelos largos sueltos, unos pantalones cortos vaqueros y un chaleco azul.
-Alice, ¿en serio?-dijo con expresión divertida.
-¿Qué ocurre?-pregunte mientras me quedaba mirándola sin moverme ni un solo centímetro.
-No te entiendo. Estamos en invierno, y tú llevas puestos unos pantalonescortos.
-¿Y que pasa? ¿Es un crimen? Hoy hace un día estupendo.-dije divertida mientras nos dirigíamos hacía el campo de fútbol para ver el partido, aunque a ninguna de las dos no nos gustaba el fútbol.
-Mira, este fin de semana hay un mercadillo medieval.-dijo mirándome y sin mirar en ningún momento el partido de fútbol.
-¿Y qué pasa con él?-dije sabiendo ya la respuesta que me iba a dar, y yo yaiba pensando la mentira que podía decirle para qué me dejara tranquila.
-Que quiero que me acompañes.
Oh no, ya la dijo. Pero la mala suerte es que todavía no sabía que mentira decirle.
-No lo se. Este fin de semana tenía pensado ir al cine. He oído que ha salido una película muy bonita.-yo no ponía demasiado interés en la conversación.
-Oh, venga vamos. No todos los días pasa algo como estoen este pueblo tan pequeño.
En eso tenía razón, era un pueblo con unos cuatro mil o cinco mil habitantes. Y si lo pienso mejor creo que va a ser divertido.
-Pues no lo se. Ya me lo pensare. Creo que deberías preguntar a Katy, Jessica, Claudia o tal vez a Criss si quieren ir contigo. Por si acaso yo no voy, para no quedarte sola.
-Ellas ya tiene planes. Van a una feria.
-¿Y a nosotras por qué nonos ha invitado nadie?-dije un poco enfadada.
-Me dijeron que te pregunte si querías ir.
-¿Y por qué no me los has dicho?-dije mientras sentía como empezaba a ponerme un poco roja de la furia. A mi me encantaban las ferias.
-Porque ya les he dicho yo que no vas a ir.- dijo satisfecha.
-Seras...-me sentía a punto de estallar.
-Alice, tranquila. Se que te encantan las ferias, pero quiero ircontigo al mercadillo medieval.-en ese momento parecía tan entusiasmada que sentí como la furia desaparecía.
-Bale, de está vez te perdono. Pero la próxima vez intenta hablar conmigo antes de tomar decisiones cómo estás. Y sí, iré contigo a ese mercadillo medieval.-le dije al mismo tiempo que le cogía por los hombros y la sacudía un poco.

Al acabar el colegio, esperé a Ema para ir cada una a sucasa. Ella era mi vecina. La verdad vivíamos muy cerca del colegio. Cuando salió de la clase no dijo nada. Y durante bastante tiempo hubo un silencio que pareció eterno.
-¿Y qué hay en ese mercadillo medieval?-dije para romper ese silencio que empezaba a asustarme poquito a poco.
-Pues espectáculos. Como los de fuego o los de danza del vientre... Ah, también sueltan algunas aves.-dijo feliz...