Ruido Rosa

Ruido Rosa (pero ruido al fin)
Y no, no es para quejarme, sino para calmar a sus detractores, so riesgo de ser tachado como ignorante, misógino, antipatriota, pendejo, etcétera.
No tiene nada demalo: son una bandita de chicas que aprendieron a tocar sus instrumentos y que de seguro tienen hermanos o primos o amigos mayores, quienes las influenciaron con sus discos de Zeppelin o Sabbath y que,como muchos de nosotros, ellas se soñaban en un escenario, rockeando duro. Y claro, como lo pandroso no es lo suyo, “¡pus qué chingaos!, debemos vernos ‘trendies’. Y tómala, alguien las vio tocandosus rolitas y se dijo: "Seguro que hay un madral de pobres pendejos púberes que pagarían re bien por un disco de estas muñequitas-rockeritas-light... ¡ya chingué!"
Ahora se las ve en Teleshit, en elMuere Latino, bueno, hasta en el féisbuc de sus hermanitas adoradoras de Kalimba, el violador sin licencia. En fin, eso es lo que les gusta y exactamente eso es lo que se merecen esos seguidores detele-basura, festivales caducos y enajenación ciberespacial que tiene a medio planeta en un limbo mental, mientras las conciencias libres se desmadran en las calles y por partida doble: contra las cacasgrandes que sujetan los hilos de la vida de billones en este planeta y contra las pobres almas que tanto los odian (a ellos, a los que llevan las riendas) pero que tanto los necesitan.
Pero bueno,ya me ordeñé el ganso demasiado con esto. Retomo: ya nos sabemos esta historia y por eso mismo digo que no tiene nada de malo. No pasa sólo en el rock, sino en cualquier género musical; hay gentepazguata dispuesta a tragarse lo que sea, y mucho más hablando del público adolescente, tan carente de buenos referentes en estos días (ah qué pinche disque nostalgia la mía, como si a mi generación lehubiera ido mejor), pero también otros tantos dispuestos a satisfacerlos, poniendo el ojo en valores que bien podrían pasar como lo que no son. ¡No hay ningún pedo!
Al final, quienes despierten...