Ruleta De Sentimientos

La ruleta de los sentimientos.
1 Parte
Ahi iba yo de camino hacia el hospital, no sabia bien que habia pasado y me sentia demasiado mariado, los doctores me decían que aguantara y hacían el esfuerzo por levantarme con todas sus máquinas. Mas empecé a recordar él porque estaba aquí en una larga historia.
La mañana había comenzado, un sol ardiente se sentía, el calor era sofocante algo típicodel verano, los pájaros se escuchaban de fondo y mi estómago lloraba del hambre. Me levante en busca de algo de comer, mi madre preparaba unas de esas deliciosas tostadas, mas yo no aguantaba las ganas de comerlas. Mi madre me pidió que preparara el café mientras ella seguía preparando más tostadas, así que agarre algo de agua y café y empecé a preparar este. Después de haberlo preparado serví dostazas, mi madre sacó las tostadas y sentados en los bancos del desayunador empezamos a desayunar esas deliciosas tostadas mañaneras.
Me prepare y salí rumbo al colegio, ese día entraba algo tarde, de camino topé a uno de mis grandes amigos, Cesar, siempre nos veíamos cuando íbamos de camino al colegio. Cesar es uno de mis más grandes amigos, con él he pasado las aventuras más grandiosas de mivida, aún recuerdo el día en que nos fuimos solos a una montaña, se decía que había un tipo de animal salvaje muy peligroso, pero como buenos adolescentes no hicimos caso y nos fuimos de camino hacia la torre que se encontraba en la cima de a aquella montaña. En aquel trayecto miles de árboles frutales fue lo que vimos, naranjas, jocotes, guayabas, manzanas de agua etc...
Pero nada del animal salvajeque tanto nos mencionaban. Cerca de una plantación de café se encontraba un lago algo pequeño, las ganas de entrar a este fueron demasiadas, así que nos quitamos las camisas y nos fuimos de cabeza para el lago, un gran baño nos dimos ese día, pero se nos olvidó por completo el animal cuando, a lo largo sonaba un ruido estrepitoso, empezamos a salir apuradamente de aquel lago y vimos aquellabestia a lo lejos que venía corriendo. Salimos como una bala, las camisas y tenis se nos quedaron, no hubo tiempo para ponérselos, además del pánico que sentíamos a ver ese animal detrás de nosotros. Cada vez más cerca, el miedo nos atravesaba todo el cuerpo, mas no podíamos detenernos o esa bestia nos mataría sin asco alguno, Cesar notó que no íbamos a huir si seguíamos corriendo así que me dijo quesubiéramos a un árbol, mientras pensábamos mejor como salir de esta. Y así fue, nos subimos a uno de los tantos árboles, aunque mi pierna quedó rasguñada por aquel animal que no era ni más ni menos un simple doverman, claro la gente nunca lo veía ya que salían corriendo, o el trauma era tanto que no recordaban la figura de aquel animal. El perro nos ladraba sin cesar como queriéndonos matar aladridos, pero nosotros no bajaríamos hasta encontrar un plan para huir de ahí. Empezamos a ver alrededor y solo teníamos dos alternativas, quedarnos hasta el anochecer para que el perro se cansara o agarrar algunas frutas y lanzárselas para ganar un poco de tiempo en la escapada, así que decidimos tomar la opción dos, empezamos a lanzarle las manzanas de aquel árbol, algunas tan solo eran semillasotras estaban completas, hasta que Cesar lanzó una de aquellas manzanas con tanta fuerza, que el animal empezó a tomarse el asicó momento en el cual huimos despavoridamente, pero no fue mucho tiempo cuando nos detuvo un señor algo viejo, el cual nos dijo -¿Que hacen por aquí un par de mocosos como ustedes? no saben que esta es mi propiedad privada. Estábamos tan tensos que solo entendimos privada, leagarre un brazo y le dije -Ayúdenos por favor, un perro muy bravo nos está siguiendo, le hicimos un daño para tomar tiempo pero ya está muy cerca. Y así fue el perro nos alcanzó pero en este momento venía moviendo su cola como cuando un perro está muy feliz. El hombre algo extrañado notó que uno de sus ojos estaba golpeado y nos preguntó que si estábamos relacionados con esto, Cesar se quedó...