Sabiduria de las emociones
de las emociones
NORBERTO LEVY
PLAZA & JANES EDITORES, S.A.
Diseño de la colección: Marta Borrell
Ilustración de la portada: Illustration Stock
Primera edición: enero, 2000
© 1999, Norberto Levy
© de la presente edición: 2000, Plaza & Janes Editores, S. A.
Travessera de Gracia, 47-49. 08021 Barcelona
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Printed in Spain - Impreso en España
ISBN: 84-01-01323-2
Depósito legal: B. 1.901-2000Fotocomposición: Comptex & Ass., S. L.
Impreso en Litografía Roses, S. A.
Progrés, 54-60. Gavá (Barcelona)
L 013232
Texto escaneado y revisado por nora6300 entre los meses de julio y agosto de 2004
ÍNDICE
Introducción general 9
Uno.
La dignidad del miedo 13
Dos.
El enojo que resuelve 35
Tres.
La culpa que tortura y la culpa que repara 71
Cuatro.
Exigencia yexcelencia 97
Cinco.
Aprender de la envidia 123
Seis.
La vergüenza y su curación 141
INTRODUCCIÓN GENERAL
El propósito central de este libro es mostrar hasta qué
punto está presente en la naturaleza misma de las emocio-
nes categorizadas como conflictivas, su condición de señal.
Del mismo modo que las luces del tablero de mandos del
automóvil se encienden e indican que hasubido la tempe-
ratura o queda poco combustible, cada emoción es una luz
de tonalidad específica que se enciende e indica que existe
un problema a resolver.
El miedo, la ira, la culpa, la envidia, etc., son estupendas
y refinadísimas señales, que alertan, cada una de ellas, acer-
ca de un problema particular y su función es remitir a ese
problema.
Por lo tanto, las emociones sonaprovechadas completa-
mente cuando uno aprende qué problema específico detec-
ta cada emoción y cuál es el camino que resuelve el proble-
ma detectado.
Cuando esto ocurre, uno se concentra en la resolución
del problema y le agradece a la emoción haber orientado la
mirada en esa dirección, por más dolorosa o inquietante
que dicha emoción pueda haber parecido al comienzo.
Continuando con lametáfora del tablero de mandos, las
luces se aprovechan en toda su utilidad cuando uno apren-
de qué es lo que indica cada una, y sabe, además, cómo en-
caminarse a resolver el problema que registra: sé que la luz
que se encendió indica que hay poco combustible y sé
cómo dirigirme hacia la próxima gasolinera. Cuando llego
allí y cargo combustible he completado el circuito resoluti-
vo quela luz puso en marcha.
Solemos creer que las emociones son el problema. Que el
miedo, el enojo, la culpa, etc., son los problemas que nos
acosan. Y no es así. Se convierten en problemas cuando no
sabemos cómo aprovechar la información que brindan,
cuando nos «enredamos» en ellas y nuestra ignorancia emo-
cional las convierte en un problema más. Entonces sí, cada
uno de estos estadosagrega más sufrimiento estéril a la expe-
riencia que vivimos. Pero, repitámoslo una vez más, no es la
emoción en sí lo que perturba sino el no haber aprendido
aún cómo leer y aprovechar la información que transmite.
En esta obra presentamos un análisis de cada emoción, des-
cribimos los errores más habituales que cometemos en rela-
ción con cada una de ellas y mostramos, de la forma másdetallada posible, cuál es el problema que cada emoción
señala.
En este primer libro comenzamos con las tres emociones
conflictivas consideradas, tradicionalmente, como las bási-
cas y universales: el miedo, la ira y la culpa. Añadimos a
ellas, la envidia, considerada habitualmente como el proto-
tipo de la emoción negativa, y la vergüenza, que si bien pa-
rece tener un tono menor en...
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