Sala De Profesores
Introducción
Es objetivo del presente trabajo dar cuenta de la observación de un colectivo: la “sala de profesores” en varias instituciones de enseñanza media de la ciudad de Buenos Aires (una escuela municipal, una escuela privada cooperativa y un colegio confesional). Espacio de “recreo” de los profesores pero también de intercambio de pareceres, de catarsis deproblemáticas de la vida personal y profesional de los actores en juego, de comunicaciones entre directivos y docentes (anuncios en pizarra, carteleras) que no siempre se lleva a cabo satisfactoriamente.
Atraviesan esta sala de profesores, las transformaciones recientes del sistema educativo argentino, concretamente la etapa de Reforma Educativa que se inició en los años 90, en el marco de unatendencia neoliberal.
Es propósito del análisis de nuestro colectivo, el problematizarlo y cuestionarnos cómo se insertan los docentes de estos grupos de escuelas medias de la Ciudad de Buenos Aires, en el contexto globalizado actual, cómo perciben los cambios, cómo les afectan, cómo se encuentran posicionados frente a la Sociedad del espectáculo de la que forman parte, cómo crean vínculos entresí.
1. Sociedad globalizada: un mundo sin fronteras.
Estamos frente a una contemporaneidad compleja conformada por una pluralidad de mundos heterogéneos aunque relacionados entre sí. Como señala Marc Augé: “las relaciones de sentido (las alteridades y las identidades instituidas y simbolizadas) pasan por “esos nuevos mundos” y sus entrecruzamientos”.[1]
Estamos frente aun “mundo agotado”, como dice Bauman, “donde no hay un “afuera”, ni una vía de escape, ni sitio para refugiarse, ni espacio para aislarse y ocultarse”.[2] En él hay una nueva vivencia del espacio y del tiempo. La velocidad de transmisión alcanzada nos ubica a todos muy cerca unos de otros., reduce distancias y difumina límites que se vuelven frágiles y porosos.
En un mundo globalizado en elque todos dependemos cada vez más de todos, es indispensable que prime el diálogo sobre la lucha. Sin embargo, dicho diálogo no puede construirse sino sobre la base del respeto por la dignidad humana, sobre la existencia de igualdad de oportunidades para todos, cosa muy lejana a lo que predomina en el “nuevo (des)orden mundial”. La mutua dependencia aludida nos remite a una opción única: instalarla “solidaridad de los destinos” o caminar hacia la destrucción. Por ello Bauman nos dice que “la globalización es, entre otras cosas (y quizás más que ninguna), un desafío ético”[3] ante el cual si vemos el mal pero no hacemos nada o no intentamos coartarlo, adoptamos la actitud de “transeúntes” que pasan , miran y no se comprometen.. Por otra parte, ninguna solución “local” puede serlo de la“global”.
2. Los docentes:¿transeúntes de ese mundo?
¿Cómo perciben los docentes los cambios de los últimos años? ¿Qué eco encuentran estas transformaciones en la “sala de profesores”? La queja recurrente que se aprecia en el registro de la observación de nuestro colectivo da cuenta de un malestar que manifiesta contornos difusos, imprecisos.
Por una parte el docente no sesiente preparado para un mundo que cambia vertiginosamente. En efecto, el mapa mundial ha sufrido significativas transformaciones en las cuales anclan “la pérdida de certezas, la difuminación de verdades y valores unívocos, la percepción nítida de un decisivo descentramiento del sujeto, de la diversidad de los mundos de vida, las identidades y subjetividades.[4]
Ante este escenario, la“sala de profesores” muestra un conjunto disímil y variado de actitudes: a) el desconcierto de los docentes sexagenarios abrumados por las NTICs a las que demonizan y la distancia generacional tan acentuada que los separa de sus alumnos, b) la postura de quienes intentan mantener la calma y redituarse aggiornándose ante nuevos desafíos, sin desvalorizar todo lo antiguo de lo que preservan lo que...
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