Santuarios Mariano En Tierras De Aragón
Tendriamos que comenzar el relato de la presencia de la devoción a María en tierras de la actual Comunidad aragonesas, en las tierras del Viejo Reino de Aragón, por la Virgen del Pilar. Pero la singularidad e importancia de esta devoción ha demandado ya untratamiento especial en un magnífico estudio del canónigo y profesor don Tomás Domingo, al que ustedes ya han tenido acceso y que permite conocer con precisición su historia y las repercusiones en la religiosidad popular. Por ello podemos introducirnos directamente en el relato, a modo de sucinto catálogo, de lo que ha sido el panorama de la devoción mariana en las comarcas aragonesas; no sin dejarclaro que la magnitud de las advocaciones nos impedirá estudiar su totalidad, aunque al hilo de la narración de las grandes manifestaciones marianas comarcales no dejemos de citar otras que -hay que decirlo ya- no tienen menos importancia pero se limitan en aras de la amplitud de este trabajo.
POR LOS VALLES DEL PIRINEO ARAGONES
El mundo altomedieval, el momento en el que se construyen loscimientos de lo que será el Reino de Aragón, tiene como escenario particular el Pirineo; un territorio de valles que se constituyeron en unidades plenamente diferenciadas con sus costumbres y sus devociones. Las ermitas van salpicando las alturas, como si el hombre quisiera alcanzar la cercanía de lo divino, como si las gentes necesitaran tener una referencia cuando levantan la vista al cielo enpetición de agua, de consuelo o de ayuda. El paisaje condiciona todo y en esa lucha dramática del hombre con el medio María ha contribuido a la unidad de los pueblos al sentirse amenazados por alguna necesidad, catástrofe o carencia. Por ello abundan las devociones vinculadas a la dominante de la verticalidad: Nuestra Señora de la Peña (Salvatierra o Santa Cilia), Nuestra Señora del Pueyo (Siresa,Acumuer, Ulle, Biniés) o la Virgen de la Cueva en Jaca. No faltan las que el santo Monfort llamaba del dominante del alimento: Nuestra Señora de las Eras (Cortillas, Berdún), la Virgen del Prado (Cortillas) o Nuestra Señora de las Viñas (Escó); e incluso la dominante del camino explica las devociones a Nuestra Señora del Puente (La Peña) a la que cantaban "salves" los almadieros al bajar con lostroncos de madera por el río Gállego, Nuestra Señora del Camino (Ena), que acabó con la grave sequía de 1720 en Ena y Paternoy, o Nuestra Señora de los Canales en Oliván. También habría que hablar de la Virgen de Escabués, en el lugar de Echo, que tiene una hermosa tradiciòn: la de las doncellas ayunando algún día de la semana -durante siete años- para ofrecerselo a la Virgen simbolizado en uncandelabro con siete velas. La ermita de Nuestra Señora de los Palacios, en las tierras serrablesas de Matidero, centra una amplia devoción en la que no faltaba el día de la fiesta la famosa caridad a base de torta y vino.
Entre todas ellas, en estas tierras del antiguo reino aragonés se pueden singularizar dos. NUESTRA SEÑORA DE LOS ANGELES en Villanúa es una curiosa talla en madera que pasa...
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