Schopenhauer y las falacias

EL ARTE DE TENER RAZON

Por Rodolfo M. Fattoruso
Schopenhauer, cuya mirada sobre el hombre saludablemente carece de encanto, entendía que en todos nosotros había algo animal y perverso que nopodía ser domesticado y que, en cambio, acaso prestaría servicios en determinadas áreas. Por eso compuso un pequeño opúsculo titulado “El Arte de Tener Razón Expuesto en 38 Estratagemas” (Edaf), destinadoa enseñar el modo de ganar cualquier discusión sin que necesariamente estemos bendecidos por la verdad.

Este curioso escrito se funda en la creencia de que “en la mayoría de las personas, a lainnata vanidad se une la incontinencia verbal y una innata falta de probidad”, y por lo tanto constituyen legión aquellos que intentan ganar una discusión con medios lícitos e ilícitos. Entiende elpensador que cualquier contradictor honesto tiene que estar atento a la deshonestidad y aún, si quiere, aplicarla cuando tiene frente a sí a una persona que busca ridiculizarle en público sobre la base dela pura sofística de ocasión. El sentido de este manual, en rigor, es de auxilio para los que cometen el error de creer que otros se inclinarán ante la verdad, cuando los hechos muestran que pocasveces ésta importa, dado que el botín es la victoria en una justa.

Entre la amargura y la ironía, este tratado –que es versa más de psicología que de dialéctica-- tiene momentos muy divertidos y acasomuy reveladores. Así, por ejemplo, la Octava Estratagema nos invita serenamente a provocar la cólera del adversario, pues, “en su furor, no será capaz de juzgar correctamente y percibir su propiaventaja. Se irrita su cólera haciéndole, sin disimulo, algo injusto, vejándolo y, sobre todo, tratándolo con insolencia”.

Otro modo de ir en pos del triunfo en medio de la conflagración retórica estabrillantemente expuesto en la Novena Estratagema; consiste en hacer preguntas, en un orden distinto del que exige la conclusión que se pretende, con cambios de todo género. Según Schopnerhauer,...