se comio mis papas

Dejé la manchada pluma sobre el papel que arduamente intentaba llenar de palabras. La imaginación no llegaba a mi cerebro, estaba en un típico ‘bloqueo de escritor’.
El abandono de Kate me habíadestrozado mentalmente; no podía concentrarme, no podía ver, ni escuchar, ni siquiera respirar y suspirar sin pensar en ella. Y le digo abandono, porque es la única palabra que describe cómo me siento.Abandonado. Se fue, y no me llevó con ella. Sabiendo todo lo que la amaba, que la adoraba.
Su cabello rubio siendo empujado por las débiles fuerzas del viento, sus ojos verdes iluminados por la cálidaluz del sol. Todas sus imperfecciones que no cubría, porque amaba cada una de ellas. Cuando contaba todos los lunares de mis brazos, aunque sabía que era imposible acabar. Cuando su mano rozaba la míainesperadamente, y me daba un cosquilleo que recorría todo mi cuerpo como energía. Ella tan monócroma y yo tan variable. ¿Cuánto tiempo más tendré que esperar por mi pequeño algo?
Algo tan grandeen una mente tan pequeña como la mía.
Y ahí fue cuando me di cuenta de lo pequeños que somos, o éramos, ella y yo. En un mundo tan grande en un espacio tan pequeño. Y aunque nosotros seamos pequeños,tal vez del tamaño de una bacteria, nuestros pensamientos no lo eran ni serán. Lo que sentimos no es pequeño. Pensamos en grande. Y nuestro mundo, era todo lo que compartíamos, y nuestro espacio éramosnosotros. Las estrellas eran mis lunares, y las lunas sus ojos.
El sol era toda toda ella.
Nuestros viajes hacia las estrellas, tomados de la mano; acostados en la cama. Ella volaba sin alas, y yosabía cuando lo hacía: su mirada estaba perdida en un punto el cual nunca nadie podría encontrar. Estaba hecha de porcelana, fina, y de fácil quebramiento. A veces, cuando lloraba, sus ojos eran unade las cosas más hermosas que la vida humana podía presenciar. El universo en tus ojos, le decía. Ella reía ante mi comentario y una sonrisa se le escapaba a pesar de estar bañada en lágrimas. Y es...