Secundaria
CURSO DE TEOLOGÍA FUNDAMENTAL
Primer Ensayo
Tema:
El milagro de la oración
“La vocación suprema
del hombre es la divina”.
Gaudium et spes 22
Introducción
Ciertamente Jesús es el rostro verdadero de Dios y del hombre. Es rostro del hombre porque vivió su vocación a diferencia de Adán que rechazó el plan de Dios con su pecado. Y como elpecado deshumaniza. En Jesús tenemos una auténtica antropología. Por lo que decimos que la vocación del hombre es la vocación divina. Y verdadero rostro de Dios pues nos ha dado a conocer a Dios Padre.
Ahora esta misión efectuada por Jesús tiene por fuente la experiencia cercana, filial y amorosa con el Padre vivida en la oración, como espacio de comunión con ÉL. Así es como Jesús va identificandosu voluntad con la voluntad del que lo ha enviado. De hecho en el NT encontramos numerosos encuentros de Jesús (a solas, con sus discípulos o con la gente) en la que la oración antecede a sucesos importantes. E indudablemente para los discípulos la experiencia de la oración de su maestro los marca profundamente así como sus signos (milagros).
Pero no hay mayor signo que el mismo signo porantonomasia: Jesús. Y como todo lo referente a él nos conduce a Dios, no es de extrañarnos que la oración que nos ha legado sea hoy por hoy un signo de Jesús que, indudablemente, nos refiere a Dios mismo. En lo personal, creo que hablamos de la oración como signo por el cual damos cuenta del hombre como Capax Dei desde la conocida revelación de Dios en la creación. Dicho lo anterior espero presentaren las siguientes líneas los siguientes elementos constituyentes de la experiencia religiosa del hombre considerando como génesis de ella la revelación y auto comunicación de Dios.
La Revelación de Dios en la creación
De frente al tema de la Revelación en la que Dios y el hombre son elementos constituyentes. Dios toma la iniciativa en plena libertad y gratuita mientras que el hombre esreceptor. Es decir, no hay revelación sin el hombre.
Lo que supone entonces preguntarnos por la posibilidad de esta comunicación. ¿Puede Dios hablarle al hombre? Para los cristianos creemos que sí, he ahí nuestra “razón” de la opción que hemos tomado al ser creyente. Porque nadie está obligado a creer. Y los que creemos damos ese paso aun cuando no entendamos esa parte del misterio. Quizásporqué entonces iría con nuestra concepción de misterio. San Agustín decía que si comprendes a Dios ese no es Dios. Pero ¿qué es el misterio? Incluso en esto los cristianos tenemos diferentes comprensiones. O ¿es que la razón no anda por los caminos de la fe? ¿Puede la razón ser un peligro para la fe? o ¿Puede la fe iluminar la razón? Sesboüé, en su libro “Creer” una invitación a las mujeres y hombredel siglo XXI, ya observaba que el confiar, término sin resistencia a ser aceptado socialmente, era tan propio de lo humano. ¿Cómo no confiar en lo que dicen los demás? ¿A qué se debe esto? Sergio Silva, en sus apuntes de Teología fundamental, piensa que aquello responde a un nivel ontológico. Es decir de la dificultad de la persona para no asumir estructuras del pasado. De igual modo hasta paraconfiar empleamos distintos criterios (familiaridad, testimonio, autoridad…). Sesboüé inclusive advierte que los positivistas, en particular los científicos, confían en sus hipótesis. ¿Y acaso una hipótesis no es un supuesto?... Verdaderamente afirmar algo es, a la vez, dar por entendido otra cosa. ¡Y vaya que ese entendido no siempre coincide!
Así pues, Dios habla pero no como nosotros.Apreciemos que todas las tradiciones religiosas lo entienden así. En el caso del judaísmo, esto queda manifestado por los relatos de ángeles y los testimonios de los profetas. El cristianismo así también lo comprende por Jesús. Pues en Jesús, verbo encarnado, palabra divina, Dios habla en modo humano. En el modo de JESÚS, hombre verdadero y Dios verdadero, se dirige a la raza humana.
Ahora, Dios...
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