Seduccion de las palabras

La seducción de las palabras

Las palabras arraigan en la inteligencia y crecen con ella, pero traen antes la semilla de una herencia cultural que trasciende al individuo. Viven también en los sentimientos, forman parte del alma y duermen en la memoria. El espacio de las palabras no se puede definir por que atesoran significados a menudo ocultos para el intelecto humano, sentidos que sinembargo quedan al alcance del conocimiento inconsciente.
Una palabra posee dos valores, el primero es personal del individuo, va ligado a su propia vida y el segundo se inserta en aquel pero alcanza a toda la colectividad, este segundo significado conquista un campo inmenso, donde caben muchas mas sensaciones que aquellas extraídas de su preciso enunciado académico. Las palabras se heredan unas aotras y nosotros también heredamos las plaraba y sus ideas y por eso pasa de una generación a la siguiente con facilidad que demuestra el aprendizaje del idioma materno.
La capacidad del habla se debe a la dotación genética del ser humano y como explican los psicolingüistas, en lo esencial está impresa en el genotipo de nuestra especia. Y se desarrolla mucho o nada o poco, si, pero se transmite comoun legado que acumula la experiencias seculares y las agranda y las enriquece a medida que se heredan. Los contextos de las palabras van sumándoles así la historia de todas las épocas y sus significados impregnan nuestro pensamiento.
Nadie razona previamente sobre las concordancias y las conjugaciones cuando habla, nadie programa su sintaxis cuando va a empezar una frase.
José Antonio Marinaha sugerido que las palabras tienen su propio inconsciente y pueden ser también ser psicoanalizadas, y con ese psicoanálisis estaríamos examinando el subconsciente colectivo de toda una comunidad hablante, por que las palabras se han ido formando durante los siglos de una manera inteligente y fría pero han acumulado también un significado emocional que acompañara siempre a sus étimos.
No existensinónimos completos aunque a veces parece que sí, debido a que las palabras no solo significan, también evocan. Y dos palabras de conceptos iguales no evocan lo mismo si son dos palabras diferentes. El lenguaje no es un producto, si no un proceso psíquico y estudiar este proceso es estudiar la psiquis humana.
Las palabras tienen una vida larga y amplia, las palabras pronunciadas por los abuelospueden sobrevivir a toda las influencias, por que se incrustaron en nuestra gramática universal cuando estábamos adquiriendo las herramientas del lenguaje, las que siempre anidaran en nuestra inteligencia. El lenguaje como ya se ha demostrado en la psicología, procede de un encadenamiento de la razón y nada resulta casual en el puesto que “el hablar es condición necesaria del pensar”. Todo idiomaestá integrado por un cableado formidable del que apenas tenemos consciencia y que sin embargo, nos atenaza en nuestro pensamiento. Pensamos con palabras y la manera en que percibimos estos vocablos, sus significados y sus relaciones, influye en nuestra forma de sentir, Y así se extienda nuestro campo de palabra, así estarán lejanos o próximos entre sí los limites de nuestra capacidad intelectual.La manera en que nos comunicamos nosotros mismos es la manera en que pensamos y razonamos, la forma en que hacemos uso de una herramienta que adquirimos sin esfuerzo durante la infancia y que aun puede crecer y desarrollarse en la madurez.
La palabras tienen un poder de persuasión y un poder de disuasión, y tanto la capacidad de persuadir como la de disuadir por medio de las palabras nace en unargumento inteligente que se dirige a otra inteligencia. Su pretensión consiste en que el receptor lo descodifique o lo interprete o lo asuma como consecuencia del poder que haya concedido al emisor. La persuasión y la disuasión se basan en frases y razonamientos, apelan al intelecto y a la deducción personal. Todo psicólogo sabe que cualquier intento de persuasión provoca resistencia. Por...