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Juan Manuel Silva Camarena
Investigador de la División de Investigación de la Facultad de Contaduría y Administración, UNAM.
En nuestros días la expresión curriculum vitae parece poseer una significación enteramente comprensible de suyo. Y sin embargo, no debemos entenderla muy bien, porque ahora ese enunciado no se refiere (como quisieran decirlo suspropios términos) al curso que ha tomado nuestra vida según lo logrado por nuestro ser y nuestro quehacer5, sino a la comunicación (a menudo magnificada, cuando menos realizada ostentosamente) de lo que hemos hecho en nuestro oficio o nuestra profesión, reducida casi a un mero registro cronológico de habilidades, aprendizajes y puestos desempeñados. Pero sin tener a la vista la relación entre loque se es y lo que se hace, los curricula de las personas sólo presentan lo que ellas han hecho para atender "las necesidades" (sin que cuente, desde luego, la autenticidad de una vocación o del amor por el propio trabajo), bajo el régimen laboral de una administración cuyos mecanismos naturalmente deshumanizados la han vuelto ciega para todo aquello que no sea susceptible de ser juzgado con elcriterio, impersonal y despersonalizador, de la eficiencia pragmática.
¿Qué es lo que todos, o casi todos hacemos? Trabajar. Llevar a cabo un oficio, un empleo, una profesión. Pero en el trabajo hay algo más importante que la eficiencia, porque se trata de un factor que precisamente la hace posible. Este algo, de carácter ético, es lo único que funciona como razón de ser de una genuina eficienciaen el quehacer de las profesiones y los oficios. La palabra profesar significa "declarar o enseñar en público'', y deriva del latín culto profiteri (cuyo participio es profesus), que quiere decir "declarar abiertamente'', ''hacer profesión'', ''confesar''6. Del mismo origen provienen las palabras "profesor" y "profesión", que sirven para hablar de ''quien hace profesión de algo''. Así decimosque alguien "hizo profesión de fe...", que "profesó en la universidad de...", etcétera. Por un lado, pues, el que declara públicamente, el que es un profesor, quien profesa una convicción; y por el otro, por la vía de la profesión, el profesional. El que es "un profesional" renuncia a sus intereses personales, cualesquiera que éstos sean, y "en cuerpo y alma" se pone al servicio de los intereses desu profesión, cuyo fundamento ético (ethos, o forma peculiar de ser, ontológicamente7 hablando), asentado en la dignidad humana, impide tomar al hombre como un medio. Esa dignidad ética hace decir a Kant que al ser humano jamás se le debe tomar como un medio sino como un fin en sí mismo8.
Todo el sentido ético del trabajo tiene su fundamento en la conexión de esa dignidad suya con su propioser, con lo que esencialmente es como ser- obrero (o ente que trabaja). El requerimiento pragmático de eficiencia usa a la persona como medio para conseguir beneficios o utilidades; en cambio, la exigencia ética de eficiencia, generada por el sentido ético del trabajo, toma al hombre respetándolo como un fin en sí mismo, y a su labor, como algo digno del mismo respeto que lo humano. El trabajotiene un sentido ético, porque puede hacerse bien o mal; el sentido ético de la vida es posible porque puede vivirse bien o mal (y desde Aristóteles, en su Ética nicomaquea9, se ha visto la relación estrecha entre vivir bien, obrar bien y ser feliz).
Ahora bien, si no perdemos de vista el sentido original de "profesar" y de "ser profesional", quedamos en mejores condiciones para entender lo quequiere decir ética profesional, pues será más o menos evidente que se trata de la fuerza moral en la cual se apoya lo que profesamos, nuestra profesión. En otras palabras, estamos hablando del fundamento ético de nuestro quehacer; en primer lugar, públicamente declarado (como en la protesta que se rinde cuando alguien en una institución educativa queda autorizado académica y moralmente para...
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