Ser humano y Dios en San Agustín

 María Lourdes Durán Díaz

ACTUALIDAD DEL PENSAMIENTO DE SAN AGUSTÍN EN EL PROBLEMA DEL SER HUMANO.
“Y así, dice San Pablo, que hemos recibido, no el espíritu del mundo, sino el Espíritu de Dios, para que conozcamos los dones que el Señor nos ha dado”
(Confesiones XIII)
Lo que aquí recogemos son las impresiones y conclusiones que hemosextraído del curso ofrecido por el Profesor Santiago Sierra en relación a una serie de cuestiones que nos planteamos. Como las consideramos fundamentales, las tuvimos presentes a lo largo del curso y al ser las que más se relacionan con nuestro interés, nos hemos centrado en ellas para elaborar nuestras reflexiones:
¿Quién es el ser humano para Agustín de Hipona?
¿Qué significa esto para elhombre actual?
¿Somos realmente más humanos gracias a nuestra libertad?
¿Vivimos un estado de felicidad auténtica?

El Profesor nos hizo ver que los tiempos que vivimos son agustinianos y que Agustín tiene que decirnos hoy muchas cosas. Esto es así porque son tiempos en los que vemos la importancia que tiene la interioridad frente a la dispersión a la que nos conducen los múltiplesquehaceres cotidianos. Frente a esto, el de Hipona nos invita constantemente a la interioridad, la amistad, la esperanza, la felicidad.
Agustín no nos ofrece un recetario para salir de los problemas, sino un estilo de vida: ser buscador sabiendo que se es aprendiz. Lo importante es vivir en profundidad. Esto es lo que hace digno al ser humano: vivir en profundidad para reflejar a Dios mismo con nuestrapropia vida. Por eso no puede uno dejar de esculpir su propia estatua y trabajarse por dentro. El hombre interior es lo importante, porque no es en el interior del hombre donde habita la verdad, sino en el hombre interior que resulta de ese esculpir constante para poder llegar a agradar a Dios. Cuando me encuentre con la interioridad de mi persona, allí me encontraré con Dios, la Verdad, elfundamento de todo lo que existe, y en eso reside mi felicidad. Por tanto, los dos objetivos del hombre se unen: conocerme a mí mismo y llegar a conocer a Dios para llegar a la felicidad verdadera. “Si no eres feliz, Dios ha fracasado contigo”. Y ser feliz es estar en el camino adecuado para llegar a la meta: llegar a unirse a Dios. “Nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti.”
Para llegaral hombre interior tengo que comenzar por el exterior, por lo que el cuerpo se torna importante, la persona está formada por cuerpo y alma y, aunque ésta sea la importante “el hombre interior conoce todas las cosas por ministerio del exterior” (Confesiones, X, VI). Ahora bien, para poder llegar a entender propiamente la realidad de algo es necesario abandonar los sentidos del cuerpo, estos no sonde ninguna utilidad cuando pretendemos entender las realidades espirituales. Si queremos pensar en Dios, debemos apartarnos de los sentidos. (De Genesi ad litteram, VII, XIV, 20) Por tanto, es el alma, la mente o la razón lo más noble del ser humano que le permite ocupar ese lugar central entre Dios y el Universo creado por Él.
El hombre aparece como imagen de Dios y en la triplicidad defacultades, memoria, entendimiento y voluntad, que constituyen su alma (De Trinitate, X, XI, 18) San Agustín descubre la Trinidad, la unidad de la persona, el yo que recuerda, entiende y ama. Resulta imposible dudar de la verdad del mundo de este modo, argumento fuerte contra los escépticos que nos adelanta a Descartes. Porque…
“¿Quién puede dudar de que vive, recuerda, comprende, quiere,piensa, sabe, juzga? Tanto más cuanto si duda, vive; si duda por qué duda, recuerda; si duda, comprende qué duda; si duda, quiere estar cierto; si duda, piensa; si duda, sabe que no sabe; si duda, sabe que no es conveniente dar temerariamente su consentimiento. Quien quiera, pues, dudar de todo lo demás, no puede dudar de lo antes dicho, pues si esto no fuese así, no podría dudar de nada.” (De...