ser humano
ABSOLUTISTA
El desprecio sistemático de la dignidad humana es uno de los frutos de la filosofía idealista y de la política totalitaria.ConFeuerbach (1804-1874) se inicia aquel cambio específico que convierte en inmanente la antropología hasta ahora trascendente. Para él el contenido y el objeto de la religión son absolutamente humanos;elmisterio de la teología es la antropología, el misterio del ser divino es el ser humano.
Las consecuencias, a nivel práctico, se manifiestan en un materialismo e inmanentismo absolutos: “si elserhumano es el ser supremo para el hombre, en la práctica, la ley suprema será el amor del hombre hacia el hombre”. El humanismo de Feuerbach es un humanismo ateo y materialista. En la base delaantropología de Feuerbach hay una falsa visión del hombre y de Dios. Para hacer grande al hombre es necesario destruir a Dios, porque la existencia de Dios empobrece al hombre y lo aliena… Elhombre,transformado en dios por Feuerbach, es solo un dios reducido a hombre. ¿Cómo es posible esto? Porque la esencia del hombre no se encuentra en el individuo particular, sino en el hombre genérico. El hombrecomotal, no es el individuo; la esencia del hombre es una esencia genérica.
Las raíces filosóficas de este humanismo inmanente, las encontramos en Hegel. Para Hegel (1770-1831) la única realidad eraelEspíritu Absoluto, que se realiza en la historia. La persona concreta, el individuo, es algo irreal cuya existencia tiene como fin realizar el proyecto del Absoluto.
Karl Marx (1818-1883) dalavuelta a este idealismo: sustituye el Espíritu por la Materia y especifica la esencia del hombre como praxis. Si la materia es el principio absoluto, la esencia del hombre es la transformación delamateria por medio de la praxis. El hombre es aquello que hace, o mejor, aquello que con el trabajo se hace. La esencia del hombre es su capacidad real de transformar el mundo. Marx hereda la doctrina...
Regístrate para leer el documento completo.