Ser parabola viviente
Páginas: 2 (320 palabras)
Publicado: 30 de junio de 2010
Ser parábolas vivientes
En la articulación de los carismas que se viene produciendo desde el Vaticano II, ¿podemos seguir caracterizando los carismas «religiosos» por la consagración a Dios,o por el seguimiento radical de Cristo? No, no podemos. Cada vez percibimos mejor que éstas son dimensiones esenciales de todo creyente. Por eso hemos de buscar lo específico desde otra clave.Dentro de la Iglesia carismática, ¿no estará llamada la vida religiosa a ser una parábola de lo que la Iglesia es? No, ciertamente, la única (el matrimonio es una hermosa parábola del Dios Amor yde la Iglesia Esposa), pero sí con un rostro diferente.
Una parábola es una narración sencilla (nunca tiene la fuerza imponente de un argumento o la complicación de una novela) que trata deiluminar una realidad desconocida a partir de otra conocida, en virtud de la esencial relación que existe entre ambas. Para poder realizar esta labor de puente -o, quizá mejor, de transparencia- esprecise que la narración parabólica posea estas tres características:
Ha de partir siempre de la realidad, de lo que es el mundo, de lo que las personas viven y entienden como suyo, comoauténtico. En esto se distingue claramente de la fábula (que crea siempre un mundo ficticio o imaginario).
Ha de poseer una gran fuerza interpeladora. El oyente debe sentirse sacudido por lapenetración de esa frágil y breve narración, no puede permanecer indiferente ante ella. Una parábola no es una nana para dormir al auditorio o un cuentecito para entretenerlo. Busca la decisión y latransformación.
Ha de ser bella para que el oyente pueda sentirse atraído y transportado más allá de su realidad inmediata. Pero con la belleza que brota, no de la acumulación de adornosexteriores, sino de la sobria armonía y autenticidad de la realidad que transparenta.
Por eso cabe la pregunta: ¿tiene esas cualidades, para los demás, nuestro modelo actual de vida religiosa?
En la articulación de los carismas que se viene produciendo desde el Vaticano II, ¿podemos seguir caracterizando los carismas «religiosos» por la consagración a Dios,o por el seguimiento radical de Cristo? No, no podemos. Cada vez percibimos mejor que éstas son dimensiones esenciales de todo creyente. Por eso hemos de buscar lo específico desde otra clave.Dentro de la Iglesia carismática, ¿no estará llamada la vida religiosa a ser una parábola de lo que la Iglesia es? No, ciertamente, la única (el matrimonio es una hermosa parábola del Dios Amor yde la Iglesia Esposa), pero sí con un rostro diferente.
Una parábola es una narración sencilla (nunca tiene la fuerza imponente de un argumento o la complicación de una novela) que trata deiluminar una realidad desconocida a partir de otra conocida, en virtud de la esencial relación que existe entre ambas. Para poder realizar esta labor de puente -o, quizá mejor, de transparencia- esprecise que la narración parabólica posea estas tres características:
Ha de partir siempre de la realidad, de lo que es el mundo, de lo que las personas viven y entienden como suyo, comoauténtico. En esto se distingue claramente de la fábula (que crea siempre un mundo ficticio o imaginario).
Ha de poseer una gran fuerza interpeladora. El oyente debe sentirse sacudido por lapenetración de esa frágil y breve narración, no puede permanecer indiferente ante ella. Una parábola no es una nana para dormir al auditorio o un cuentecito para entretenerlo. Busca la decisión y latransformación.
Ha de ser bella para que el oyente pueda sentirse atraído y transportado más allá de su realidad inmediata. Pero con la belleza que brota, no de la acumulación de adornosexteriores, sino de la sobria armonía y autenticidad de la realidad que transparenta.
Por eso cabe la pregunta: ¿tiene esas cualidades, para los demás, nuestro modelo actual de vida religiosa?
Leer documento completo
Regístrate para leer el documento completo.