Serie Westmoreland 5 Tormenta De Pasion Brenda Jackson
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TORMENTA DE PASION
TORMENTA DE PASIÓN
Brenda Jackson
Serie Westmoreland 5
Podía llevarse a cualquiera a la cama con sus dulces palabras, y lo hacía a menudo. El bombero Storm
Westmoreland había estado con muchas mujeres sin que ninguna dejara huella en él.... hasta que un tórrido fin de
semana con una sexy virgen hizo que el seductor Storm deseara algo más que lasatisfacción física....
Jayla Cole se encontraba en el ojo del huracán, incapaz de estar a la altura del atractivo Storm.... o de soportar la
tormenta emocional que él desencadenaba dentro de ella. ¿Se sentiría satisfecha con una relación meramente
sexual... o seguía deseando formar su propia familia?
Brenda Jackson
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TORMENTA DE PASION
CAPÍTULO 1
— ¿Jayla? ¿Qué estás haciendo en NuevaOrleáns?
Jayla Cole dejó escapar un grito ahogado por la
sorpresa. Al darse la vuelta, su mirada se cruzó con la
del hombre alto, moreno y peligrosamente guapo que
tenía frente a ella en el vestíbulo del hotel Sheraton, en
el hermoso Barrio Francés.
pero, afortunadamente, él siempre rechazó sus avances
con buenos modos.
Pero habían pasado diez años de aquello y la edad le
permitía admitir algo que sehabía negado a admitir
entonces. Aquel hombre no era su tipo y estaba
totalmente fuera de su alcance.
El hombre era Storm Westmoreland, de quien se decía
que era capaz de dejar sin aliento a la mujer que llamara
su atención. Según había oído, Storm era un experto en
complacer a las féminas pero sin prometer nada. Las
malas lenguas decían que tenía la increíble habilidad de
hacer realidad lasfantasías de una mujer, dejando un
recuerdo para algunas indeleble.
—¿Cuánto tiempo estarás aquí?
irrumpiendo en sus pensamientos.
También era el hombre que la había evitado de forma
repetida durante los últimos diez años.
—Yo vine hace un par de años y lo pasé genial —dijo
él.
—Llegué a la ciudad hace un par de días para asistir a la
Convención Internacional de Comunicación Empresarial
—contestóJayla tratando de no perderse en la
profundidad de sus ojos oscuros, la sensual
voluptuosidad de sus labios o el pequeño brillante que
llevaba en la oreja derecha.
Jayla no pudo evitar preguntarse si habría venido con
una mujer o con sus hermanos. Todo aquél que hubiera
vivido en Atlanta sabía quiénes eran los hermanos
Westmoreland: Dare, Thorn, Stone, Chase y Storm. Su
única hermana, Delaney, lamenor de todos, los había
dejado sorprendidos a todos al casarse con un jeque de
un país en Oriente Medio dos años atrás.
Por si fuera poco, tenía un tono de piel del color del
chocolate con leche, el pelo muy corto y un par de
hoyuelos de lo más sexy.
Llevaba puestos unos pantalones de pinzas de color
caqui y una camisa que acentuaba su sólida constitución.
Su torso seguía siendo tan amplio ysu trasero tan prieto
como recordaba. Estaba fenomenal con cualquier cosa
que llevara.
—¿Y tú? —se decidió a preguntar a continuación—.
¿Qué estás haciendo en Nueva Orleáns?
—He venido a una reunión de la Asociación
Internacional de Jefes de Bomberos.
—Leí en el periódico lo de tu ascenso. Papá estaría
orgulloso de ti, Storm.
—Gracias.
Jayla vio la expresión de tristeza reflejada en los ojos deStorm y comprendió el motivo. El tampoco había
superado la muerte de su padre. De hecho, la última vez
que había visto a Storm había sido en su funeral seis
meses atrás. De vez en cuando la llamaba para
preguntarle cómo estaba. Adam Cole había sido el
primer jefe de Storm cuando entró en el cuerpo de
bomberos con veinte años. El padre de Jayla siempre
había querido a Storm como al hijo que nuncatuvo.
Jayla nunca olvidaría la primera vez que su padre lo
había llevado a casa a cenar cuando ella tenía dieciséis
años. Se había quedado profundamente impresionada
con él. Se enamoró perdidamente de él a pesar de los
seis años de edad que se llevaban. Por mucho que
intentó que él se fijara en ella, nunca lo consiguió.
Algunas veces llegó a ponerse realmente en ridículo
—preguntó
él
—Me quedo...
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