Señora

El bien de Dios fluye sin esfuerzo. Está siempre presente. Cuando estoy receptivo a este bien, puedo sentir el amor del Espíritu. Lo percibo en todo a mí alrededor. Al estar consciente de la bondad de Dios, comienzo a ver el mundo a través de una visión divina y afable.
Cuando cambio mi enfoque de la escasez a la abundancia, elijo acoger una nueva imagen del mundo. Al permanecer centrado en mibien —la esencia de Dios en mí— puedo ver la bondad en otros.
Observo que la presencia del bien de Dios fluye. Es evidente en habilidad de perdonar, de amar. La bondad divina renueva mi vínculo con el universo y bendice mi vida. Disfruto de paz y gozo.
Jesús le dijo: “¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino sólo uno, Dios”.—Marcos 10:18
La gracia está siempre presente en mi vida. Duranteun desafío, quizás me resista a la guía interna y tenga dificultad para superarlo. Más, cualquiera que sea la necesidad, me dirijo a la presencia de Dios en mí. Sé que la gracia divina me revelará la solución, y aguardo con fe.
La gracia corrige cualquier rumbo errado que haya podido tomar, permitiéndome superar cualquier reto. Aun en los momentos más abrumadores, me entrego a esta gracia y soyelevado por sobre todo obstáculo.
La gracia es parte de la esencia divina, y está disponible para mí incondicionalmente –siempre presente, proveyéndome apoyo. La gracia de Dios me inspira, me faculta y me impulsa a lograr mis sueños más preciados.
De su plenitud recibimos todos, y gracia sobre gracia. –Juan 1:16
Cuando enfrente retos inesperados, para los cuales no me siento preparado, me dirijoa Dios. La gracia divina está disponible para mí en todo momento y lugar. Este don poderoso de apoyo divino me calma, me consuela y eleva mi espíritu. Dios me da la fortaleza y el valor para enfrentar y superar los cambios y retos de la vida.
Al orar, permito que la gracia divina llene cualquier espacio aparentemente vacío en mi corazón y en mi vida. Soy uno con el Creador —apoyado por Suinfinito amor. Soy guiado por el "silbo apacible y delicado", y elijo vivir una vida llena de fortaleza, propósito y poder. Con claridad, creatividad, vigor y flexibilidad, prosigo con confianza y gracia según acojo las experiencias ante mí.
La gracia del Señor Jesucristo esté con vosotros. —1 Corintios 16:23

La gracia de Dios me permite superar todo reto y condición con aplomo. Al tener estopresente, la fortaleza divina me de la serenidad para vencer cualquier dificultad. Gracias al poder de Dios que mora en mí puedo comportarme con sensatez en todo momento y en cualquier circunstancia.
La gracia de Dios está en mí, al tener presente esta verdad ya no temo la enfermedad, la carencia ni la limitación. La gracia de Dios me brinda la seguridad de que Su vida perfecciona cada célula y cadafunción de mi cuerpo. Mi papel es creer y actuar de acuerdo a ello. La gracia de Dios está en mí. Estoy libre de toda preocupación y descontento. Soy amoroso, amable y feliz, libre para disfrutar al máximo cada día de mi vida.
Todos vosotros sois participantes conmigo de la gracia.–Filipenses 1:7
Protección
Sentimientos de inseguridad pueden asaltarme súbitamente. Mas, cuando lo hacen, tomo unmomento para centrarme. En vez de pensar en lo que pueda ir mal, elijo enfocar mi atención en la poderosa y protectora presencia de Dios en mí y a mi alrededor.
Respiro profundamente, confío y me lleno de paz. Invoco la fortaleza divina y siento que mi valor aumenta. Dios en mí es poderoso, elevando mi espíritu y calmando mi mente durante cualquier situación.
Dios es mi fuente, mi fortaleza y miescudo. Siento agradecimiento porque mi corazón está en paz, porque sé que siempre estoy seguro en la presencia de Dios.
“El camino de Dios es perfecto y acrisolada la palabra de Jehová. Escudo es a todos los que en él esperan.” —2 Samuel 22:31
En mis oraciones, así como en cualquier momento que note que la duda o el temor entran a mi mente, recuerdo que siempre estoy al cuidado de Dios....