Sherry Other
¿Es la mujer con respecto al hombre lo que la naturaleza con respecto a la
cultura?
Sherry B. Or t n e r *
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B uena p a r t e de l a c r e a t i v i dad de la antropología procede de l a t e n s i ó n e n t r e
d os conjuntos de exigencias: explicar los universales humanos y e xplicar l as
c oncreciones culturales.Según este c anon, l a m u jer nos p lantea uno de los
p roblemas más desafiantes. El status secundario de la mujer d entro d e l a s ociedad
c onstituy e u n v e rdadero universal, u n h ec ho p ancultural. S in embargo, dentro de
e s e h e c h o u niversal, las simbolizaciones y concepciones culturales concretas s o n
e xtraordinariamente variadas e incluso contradictorias unas con o t ra s . Ad e m á s , l a
c onsideración c oncreta d e l as mujeres y de su aport a c i ó n y p oder relativos varía
m ucho de una cultura a otra y t ambién e ntre l os distintos períodos históricos de
u na m isma t radición c ultural. Am bos aspectos -el hecho univ e rsal y l as v a riaciones
c u l t u r a l es- constituyen un problema que debe ser explicado.
D esde l uego, mi interés por esteproblema es algo más que acad é m ico :
d eseo v e r cóm o s e produce un cam b io genuino, cóm o s urge u n orden social y
c ultural e n e l q ue todo el abanico de las posibili dades humanas sea tan accesible
a l a s m u j e r e s c o m o a l o s h o m b r e s . La universalidad de la subordinación femenina, el
hecho de que o c u r r a d entro de todos los tipos de o rganización s ocial y económica, y
c on independencia del grado de com p lejidad de las sociedades, m e i ndica q ue
n os enfrentamos a algo muy profundo, muy inflexible, a l g o q ue no se p uede
e x t i r p a r m e d i a n t e l a s i m p l e r e e s t r u c t u r a c i ó n d e unas cuantas tareas y funciones
d entro del sistema social, ni siquiera reordenando toda la estructura económica. En
este artículo trato depresentar la lógica subyacente al pensamiento cultural que
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En: Harris, Olivia y Kate Young (Compiladoras). Antropología y feminismo. Editorial Anagrama, Barcelona,
1979. pp. 109-131.
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La primera versión de este artículo fue leída en una conferencia, en octubre de 1972, en el curso de "Mujeres:
mito y realidad", en Sarah Lawrence College. Recibí útiles comentarios de los alumnos y de lasprofesoras del
curso. Joan Kelly Gadol, Eva Kollisch y Gerda Lerner. Un breve resumen se presentó en las sesiones de la
American Anthropological Association en Toronto, noviembre de 1972. Entretanto, recibí excelentes comentarios
críticos de Karen Blu, Robert Paul, Michelle Rosaldo, David Schneider y Terence Turner, y la presente versión del
artículo, en la que se ha cambiado sustancialmenteel meollo de la argumentación, fue escrita en respuesta a tales
comentarios. Por supuesto, sigo siendo la responsable de su forma definitiva. El artículo está dedicado a Simone
de Beauvoir, cuyo libro E l segundo sexo (1953), primera edición francesa en 1949, sigue siendo en mi opinión la
mejor explicación global escrita por una sola persona del "problema de la mujer".
1www.cholonautas.edu.pe / Biblioteca Virtual de Ciencias Sociales
p resupone l a i nferioridad d e l as mujeres; trato de mostrar la gran c apacidad
persuasiva de esa lógica, pues si no fuer a tan convincente la g ente n o s eguiría
e scribiéndola. Pero también trato de mostrar las fuentes sociales y c ulturales d e t al
l ógica, para señalar dónde radica la posibilidad de cambiarla.
E s im portantedistinguir los n iv e le s del problem a. La c onfusión puede s er
a sombrosa. Así, por ejemplo, según cuál sea el aspecto q ue observemos de la
c ultura china, podemos extrapolar suposiciones absolutamente distintas s obre l a
s ituación de la mujer en ese país. En la ideología taoísta, el y in, e l principio femenino,
y e l yang, e l p rincipio m asculino, tienen igual peso; «la oposición,...
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