Short stories

Crimen de Lord Arthur Savile
A Study of Duty
Yo
Era la última recepción de lady Windermere antes de la Pascua, y Bentinck House fue aún más lleno de lo habitual.Seis ministros del gabinete habían llegado desde Dique del altavoz en sus estrellas y los ribands, todas las mujeres bonitas llevaban sus vestidos más elegantes, y al final de la galería de pinturas estaban la princesa Sofía deCarlsruhe, una pesada lady Tartar de futuro, con minúscula ojos negros y esmeraldas maravillosas, hablando mal francés en la parte superior de su voz, y riendo sin moderación en todo lo que se le dijo. Sin duda fue una maravillosa mezcla de gente. Paresas Gorgeous conversó afablemente a los radicales violentos, los predicadores populares rozaron faldones con los escépticos eminentes, un grupo perfectode obispos mantuvo tras una valiente prima donna de cuarto en cuarto, en la escalera estaban varios académicos reales, disfrazados de artistas, y fue dijo que en algún momento el cenáculo estaba absolutamente llena de genios. De hecho, fue una de las mejores noches de Lady Windermere, y la princesa se quedó hasta casi las once y media.
     Tan pronto como ella se había ido, Lady Windermereregresó a la galería de pinturas, donde un economista célebre fue solemnemente explicando la teoría científica de la música a un virtuoso indignados de Hungría, y comenzó a hablar con la duquesa de Paisley. Parecía maravillosamente hermosa, con su gran cuello de marfil, sus grandes azul olvidar-me-no los ojos, y sus pesadas bobinas de cabello dorado. Or pur eran - no ese color pajizo pálido que hoyusurpa el nombre de gracia de oro, pero como el oro como se teje en los rayos de sol o escondido en extraña ámbar, y dio a su rostro algo de la trama de un santo, con no poco de la fascinación de un pecador. Era curioso caso psicológico. Temprano en la vida que había descubierto la importante verdad de que nada se parece tanto a la inocencia como una indiscreción, y por una serie de aventurastemerarias, la mitad de ellos bastante inofensivo, que había adquirido todos los privilegios de una personalidad. Ella más de una vez había cambiado a su marido y, de hecho, Debrett sus créditos con tres matrimonios, pero como nunca había cambiado su amante, el mundo había hace tiempo que dejó de hablar acerca de su escándalo. Ahora era de cuarenta años de edad, sin hijos, y con esa pasión desmedida por elplacer que es el secreto de permanecer joven.

     De pronto miró ansiosamente alrededor de la habitación, y dijo, con su voz de contralto clara: "¿Dónde está mi quiromántico? '.
     "Tu qué, Gladys? -exclamó la duquesa, dando un inicio involuntario.
     'Mi quiromántico, duquesa, no puedo vivir sin él en la actualidad.
     "Querida Gladys! usted es siempre tan original, murmuró laduquesa, tratando de recordar lo que un quiromántico era en realidad, y con la esperanza de que no era lo mismo que un cheiropodist.
     "Él viene a ver mi mano dos veces por semana con regularidad-continuó Lady Windermere", y es lo más interesante de ella. '
     "¡Dios mío! ' dijo la duquesa a sí misma "es una especie de cheiropodist después de todo. ¡Qué terrible.Espero que sea un extranjero encualquier caso. No sería tan malo entonces.
     -Tengo que sin duda se lo presentara en su caso. "
     'Introducir él!' -exclamó la duquesa, "que no me refiero a decir que está aquí? y ella comenzó a mirar alrededor para un pequeño ventilador de carey y un chal de encaje muy andrajoso, a fin de estar listo para jugar en cualquier momento.
     "Por supuesto que lo es aquí, no se me ocurriríadar una fiesta sin él. Él me dice que tengo una mano psíquico puro, y que si mi pulgar había sido poco menos, más corto, que debería haber sido un pesimista confirmado, y ha entrado en un convento ".
     "Oh, ya veo! dijo la duquesa, sintiéndose muy aliviado, "le dice a la fortuna, ¿no? '
     'Y desgracias, también-respondió lady Windermere, "cualquier cantidad de ellos. El año que viene,...