Si dios habla con diferentes voces
Consideraciones Sobre el Diálogo Interreligioso
Autor: UDO SHAEFER
Traducción al español: MIGUEL GIL SANTESTEBAN
© ARCA EDITORIAL, S.L. – EDITORIAL BAHÁ'Í
Marconi, 250 – Terrassa, Barcelona, España
ÍNDICE
Prefacio 05
PRIMERA PARTE¿TIEMPO DEL FIN O NUEVA ERA?
Crisis de supervivencia 08
El “tiempo del fin”: un lugar común bíblico 10
El espíritu de la Ilustración 14
La secularización del mundo 15
El vacío espiritual 18
Las nuevas promesas de salvación: la Nueva Era 20
La nueva epifanía 23
El nuevo paradigma 26
Diferencias cardinales 29
El futuro30
SEGUNDA PARTE
SOBRE LA DIVERSIDAD Y LA UNIDAD DE LAS RELIGIONES
Nota preliminar sobre el concepto de paradigma 32
El nuevo paradigma: la unidad 33
La diversidad de religiones 34
Lo absoluto y la relatividad de la pretensión religiosa
de poseer la verdad 35
Lo singular, la ultimidad y la exclusividad
de la Revelación 36La intolerancia práctica como consecuencia
de la intolerancia dogmática 43
La actitud hacia las religiones del pasado 45
Los promotores de la tolerancia del diálogo
y de la unidad de las religiones 48
El papel de los estudios religiosos comparados 56
Una Religio in Rituum Varietate 64
El nuevo paradigma:
la Revelación progresiva71
1. El Dios oculto 72
2. El Dios que Se revela a Sí mismo 73
3. La naturaleza de las Manifestaciones 73
4. Los representantes de Dios en la Tierra 74
5. Autoridad y soberanía 75
6. Los Profetas Menores 75
7. Launidad de las Manifestaciones 76
8. La relatividad de la Revelación divina 76
9. El propósito de la Revelación:
la educación de la humanidad 81
10. Las dimensiones vertical y horizontal 82
11. La reforma divina 83
12. La Palabra creativa 8413. Cambio de paradigma 86
14. El ojo de la unidad 89
15. El espíritu de fraternidad 90
Biblioteca en Línea 92
Referencias 94
PREFACIO
La presente obra constituye un primer intento de presentar el mensaje deBahá'u'lláh en el contexto de la historia intelectual europea, precisamente en el contexto de la historia de las religiones. Para ello, he procurado valerme de un método que satisfaga – como así lo espero – las normas y convenciones científicas. Sin embargo, no pretendo que mi punto de vista pase por ser el de un científico de las religiones que, obligado a mantener una rígida objetividad, deba juzgarlos hechos expuestos “desde fuera”. Antes bien, en una época en que los teólogos cristianos viven “la experiencia del vacío” y de “la ausencia de Dios”[i](, mi perspectiva es la propia del que, sintiéndose fascinado por la Revelación de Bahá'u'lláh, intenta dar a conocer la experiencia de un nuevo Anuncio divino, llamando a la atención de la voz profética que proclama a la humanidad “el Evangeliode la llegada de Dios”[ii]. Por ello no ha de extrañarse el lector si mis exposiciones también incluyen intenciones apologéticas. Para quien juzga desde dentro, para el que sabe en virtud del secreto de la fe, es decir, para el que trabaja teológicamente y no de manera estrictamente científica, tal proceder resulta absolutamente legítimo.
La presente obra aspira a brindar, a todos los que...
Regístrate para leer el documento completo.