Sida
Como si el siglo XX no hubiera tenido bastante en materia de guerras y pestes, para despedirse dejó de regalo el SIDA. A mediados de los años 80, la humanidad se enteró que había una nueva enfermedad mortal denominada Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida. Un extraño virus tenía la capacidad de destruir las defensas del organismo, permitiendo así que alguien murierapor una simple gripe. Por aquellos años la enfermedad se popularizó con el nombre de “peste rosa”. Esta denominación popular obedecía a que todos los casos que se habían detectado, correspondían a personas homosexuales, los que estaban condenados, a muerte.
El origen de la enfermedad estuvo sumido en el misterio durante los primeros años de su aparición pública. Ningún científico podíaexplicar de dónde provenía ni cómo se adquiría; no lograban salir de su asombro inicial, y se mostraban impotentes al dar una respuesta a la gente.
La ciencia no sabía de dónde venía, ni como se contagiaba, ni por qué atacaba a homosexuales.
Pero pronto el saber popular, con alguna ayuda, pareció encontrar la respuesta que la ciencia no hallaba. El SIDA era un castigo de Dios ¿Acaso la Biblia nohabla de varios hechos en los cuales Dios, por la mala conducta de los hombres, sufrieron las consecuencias de catástrofes y pestes? ¿No era la “peste rosa” una forma de poner orden en este siglo de sexo libre y anormal? Los hombres tenían que saber interpretar el mensaje divino. Dios estaba cansado de tanto libertinaje. Los hombres del siglo XX parecían empeñados en contradecir las normas divinasque hacía miles de años Dios les había entregado.
Y en verdad la idea no sonaba tan loca. La peste sólo atacaba a homosexuales y desviados, este criterio selectivo no podía adjudicársele a un comportamiento inteligente del virus ¿O alguien podía decir que un virus era capaz de distinguir entre un homosexual y un heterosexual? Evidentemente el comportamiento de la enfermedad no respondía a losparámetros de otras enfermedades. Además existen muchos casos relatados en la Biblia en los cuales Dios, en situaciones de poner fin al libertinaje y desorden (en especial sexual) había enviado peste, plagas, etc.
Por otra parte, esto era también un premio a quienes habían ajustado su vida a las normas religiosas y no se habían tentado con conductas sexuales atractivas, pero reñidas con lamoral. Como si las evidencias fueran pocas, pronto se descubrió que también los adictos a las drogas eran atacados por la peste. Era más que notorio que Dios había decidido limpiar la Tierra de aquellos sujetos que se habían alejado definitivamente de sus mandamientos.
Esta idea del SIDA como castigo divino a desviados y amorales, llevó tranquilidad a todos aquellos que no se consideraban incluidosen ese grupo. No había de qué preocuparse si se había llevado una vida correcta y se continuaba haciéndolo.
Los años comenzaron a correr y los casos de homosexuales y adictos comenzaron a engrosar terriblemente las estadísticas de las víctimas de peste. Algunos famosos (actores, deportistas, etc.) comenzaban a ser víctimas de la peste rosa, y también caían sobre ellos el bochorno de haber sidodescubiertos en inmoralidad.
Un inserto día, un científico comenzó a notar que aparecían cada vez más casos de gente infectada que aseguraba que jamás había tenido conductas sexuales promiscuas o adicción a droga alguna. Era difícil de creer, ya que todos los casos informados eran homosexuales o drogadictos. Era lógico pensar que estas personas mintieran para salvar su honor y el de su familia.Pero ¿Y si era cierto? ¿Si la peste atacaba a gente común también?. Aquel científico decidió no quedarse con la duda. Comenzó a investigar la vida de estos infectados, se contactó con otros colegas con los cuales intercambió información y opiniones. Luego de observar varios casos similares, los científicos comenzaron a detectar ciertos parámetros, pautas, etc., en común entre los distintos...
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