siervo sin tierra

Con indignación hago un llamado URGENTE, a todos los compañeros que hacen parte de cada uno de los sindicatos, grupos o como se hagan llamar, que estoy segura luchan permanentementeporque se mejoren las condiciones de vida y trabajo de los funcionarios de la Universidad Nacional de Colombia.

Personalmente les expreso que hace meses atrás me llegue a sentir bastantecansada, irritada, afligida entre otros, porque cada vez que ingresaba al correo, me encontraba con las constantes pugnas de los unos contra los otros; por fortuna, esta situación tuvo unreceso, no obstante, últimamente, nos encontramos todos en lo mismo, situación que va en contravía de los PRINCIPIOS que caracterizan a las agrupaciones que luchan por los derechos de lostrabajadores y que son aprovechadas por aquellos que pescan en río revuelto para desprestigiar su imagen. Créanme compañeros que esto no redunda en nada bueno, estoy convencida que sitodos miráramos hacía una misma dirección, las peticiones exigidas, se alcanzarían más fácil.

Si es que no son capaces de hablar el mismo idioma en la defensa que todos dicen que estánlibrando por nosotros los trabajadores, al menos ténganse más respeto entre ustedes mismos y no se escuden en estos medios para hacer señalamientos y denuncias que no nos constan y queademás son denuncias que por lo que a mí respecta, no creo y no acepto.

Los invito a todos para que expresen entre ustedes sus diferencias y los exhorto para que tengan en cuenta este llamadoque hago con la intención de que por lo menos intenten llegar a un entendimiento por el bien de todos, de lo que somos y lo que representamos.

Me despido con una frese que leí en algúnmomento: “el diálogo, basado en sólidas leyes morales, facilita la solución de los conflictos y favorece el respeto de la vida, de toda vida humana”.