Silueta de Sor Jiuana Ines de la Cruz de Gabriela Mistral

GABB.IBLA MISTRAL

blanco:escomo el m~
vecesestaveteadocon
en tomo del tallo grueJplegarse. 1..0llc:va PUtSta de muchos picos, que
lios de la mujer; ni es el
) de la tierra tropical. EI
iU hijo a la espalda. Es la
0 10 envuelve, como 10
y fuerte, hecho con su
) clla vocca, cl Dido jue[1 ~I a cucstaS, las jomasa. Ella no ha aprcndido

as regiones, en la tierra
derramaentoncesla fat.
:egador...orolas: la silueta ancha,
lillonada: es la forma de
l blusa simple: es la forindia casisiempre tiene
Jerta de Uruapan, hacia
que no sc han deforma. signo de raza barbara.)
pejado con las trenzas
:s se hace, con lanasde
cs cl ~ra; suscadcras
ira, con la mejilla bien
:>-.

sombreroinmensocae
lje csun rcl~pago so.

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. el campo. Van silenciosos,por d paisajelleno de recogimiento; cruzan
tarde entarde una palabra,de la que recibo la dulzura, sin comprender
Habnan sido una raza gozosa; los puso Dios como a la primera pareja
;humanaen un jardin. Pero cuatrocientosafios esc1avos
les han desterudola
lmisma gloria de su sol y de sus frutas; les ban hecho dura la arcilla de sus
caminos,que es suave,sin embargo, como pulpas derramadas...
Y esamujer que no han alabadolos poetas,con su siluetaasiatica,ha de
sersemejantea la Ruth moabita, que tan bien labraba y que terua atezado
~l rostro de las mil siestassobre la parva...
:1923]

SILUETA DE SORJUANA lNEs DE LA CllUZ.
(Fragmcntode un estUdio)
I. NACE ENrJ.E LOSVOLCAN~

Naci6 en Nepantla; la recortaban el paisajefamiliar los dos volcancs; Ie verftfan su mananay Ie prolongaban la Hlei t.rat. Pero cs ellztacclhuatl, de
J perfiles, el queintluye en su indole, no el Popocateped, vasto
,--- -- - -" apice.

Dice Nervo, que la atm6sferaen escpueblo es extraordinariamente claIra. Bebia ella el aire fino de !astierras altas,que bace la sangre menos densay la mirada mas nitida y quc vuelve la respiraci6n una leve embriaguez.
~Esel aire delgado, maravillosocomo la delgadaagua de nieves.

II. "ERA LLENADE GRACIA"

&ta luz de mesetaIe hizoaquellossm grandesojos rasgadospararecoger
d anchohorizonte.Y parair en la atm6sferasutil, Ie rue dadaesaesbeltez
i suraque,a1caminar,eracomola reverberaci6n
fina de luz, solamente.
. Gabriela Mistral, "SUueta de SOt' JuanaIn~s de la Cruz' (frasmento), en u,tur'al pam ."jrm, 3..
ed., ~co,

Pomia, 1971, pp. 67-69.

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GABRIELAMISTRAL

No dene su pueblo la vaguedadde las nieblasvagabundas;asimismo,no
bay vaguedadde ensuenoen las pupilas de sus retratos. Ni eso ni la megadora de la cmoci6n. Son ojos que han vista cn la claridad de su mesetadestacarsclas criaturasy liS cosascon contornos netos. El pensamiento,derra.,
de esosojos, tendra tambien una linea demasiadoacusada.
Muy delicada la nariz, y sin sensualidad. La boca, ni triste ni dichosa:
segura;la emoci6n no la turba cn lascomisurasni en el centro.
Blanco, agudo y perfeCtoel 6valo del rostra, como la almendradcsnuda;
sabre su palidez debi6 scr muy rico el negro de los ojos y c1de los cabellos.
El cuello delgado, parccido allargo jazrnfn; par ~l no subfa una sangre
espesa;la respiraci6n se sentiamuy delicada a su traves.
Los bombros, finos tambien, y la mana sencillamentc milagrosa. Podr£a
baber quedado de ello.86JoCBO,yconocedamos el cuerpo y el alma par la
mana, gongorina como e1verso... Es muy bcUacardasabre la oscuramesa
de caoba.Los mamotretos sabioscn que estudiaba.acostumbradosa tener
sabre sf la diestra amariUay rugosa de los viejos eruditos, dcbfan SOrprendersecon la frescurade agua de csta mano...
Debi6 ser un gozo verla cammar.Era alta, bastapareceque demasiado,y
se recuecdacl verso de Marquina:
"...laluz descansalargamenteen ella".

Ill. SED DE CONOCER

Fue primero el nino prodigio que aprende a leer, a escondidas, en UDal
cuantassemanas;y despuesla joven desconcertante,de ingenio agil como
la rnismaluz, que dejaba embobadosa los exquisitos comensaJes
de! virrey
Mancera. jPobre Juana! Tuvo que soportar set el dorado entretenirniento
del hastlo docto de los lctrados. Seguramentea ellos les...