Simón bolívar

David Ochoa
Universidad Sergio Arboleda
Tercer Semestre – Grupo II

EL VUELO DEL CÓNDOR

“Para el logro del triunfo siempre ha sido indispensable pasar por la senda de los sacrificios”. (Bolívar, Simón - 1815)

INTRODUCCIÓN

Recordar la vida de cualquier hombre ilustre, suele a veces ser tedioso y complicado, la verdad es que hay muchas cosas que decir y tanto material de dondeapoyase que de alguna manera se vuelve molesto, pues, lo que queremos decir con nuestras palabras, termina siendo las palabras que otros ponen en nuestras bocas para precariamente decir después, ¡si se! porque repito lo que otros dicen.
Este escrito, no tiene ese proceder, pues, he tomado la precaución de narrar la vida, por lo menos aquella parte en la cual se forjo el carácter, de uno delos hombres más importantes de nuestra América, y para ser más exactos, del mundo entero, de una manera sencilla y coloquial sin salirme de lo real.
De cualquier modo el lector encontrará: Anécdotas, amores, situaciones agudas que marcaron la personalidad del Libertador de América Simón Bolívar, para que así pueda hacerse su propia impresión de la vida de este genio de la independencia.EL VUELO DEL CÓNDOR

La libertad, es una palabra que ha hipnotizado a los hombres desde que la naturaleza lo “parió”; algunos dirán que ella se encuentra en el corazón espontaneo del hombre tranquilo, otros que está en la voluntad humana, en fin… yo sólo se que la libertad es un precioso don que bien vale la pena recuperar.
La providencia se ha encargado de recordarnos lo que ellarepresenta, al permitir la existencia de algunos hombres que convierten su vida en un faro, que con su luz, nos muestran lo que ella claramente significa. Estos individuos, no miden los grandes sacrificios que hay que hacer, para enseñarnos y permitirnos la aprehensión de su enseñanza.
En el siglo XVIII grandes seres poseyeron formas humanas para rescatar a los hombres del sistemadecadente del que estaban siendo víctimas. Se dio la Revolución Americana, luego la Revolución Francesa y esta última se encargó de iluminar el camino a resto de las naciones. Sin embargo, esa luz se encontraba opacada en el continente americano, y para ser más exacto, en Sur América.
Fue necesario que el divino arquitecto preparara un alma lo suficientemente fuerte para esparcir portodos los rincones de nuestro hermoso continente, el significado de esta necesaria, imprescindible pero difícil palabra.
En el año 1783 en el seno de una privilegiada familia en cuya cabeza se encontraba Juan Vicente Bolívar y ponte y María de la Concepción Palacios y blanco, tomó cuerpo ese espíritu, el cual estaba destinado a correr el velo de la oscuridad que mantenía cautivos a los“Indoamericanos”.
Pero era necesario, para el destino de la “Gran Hermana” (América del sur), que ese tierno infante pasara por terribles tormentos con el fin de moldear su carácter y ser útil al cumplimiento de la “Gran Obra”.
Así pues, desde muy joven tuvo que soportar amarguras, aflicciones y carencias, pero no precisamente económicas, pues para su fortuna, en un comienzo, lo que menos teníaque preocuparle era el capital. Más bien, lo que más le faltó fue esa ternura que reclama la juventud y que al serle esquiva vuelve al individuo un ser diferente.
No bastó los mimos de la negra Hipólita y de la señora Inés Manceba de Miyares, las cuales se encargaron, sobre todo la primera, de saciar los berrinches del tierno infante, al carecer, por motivo de enfermedad, de la presenciade la madre.
Sumado a esto, la perdida muy temprana de su padre, que al partir de su lado, no le dejo oportunidad de conocer la templanza y sumisión que inspira el progenitor. Esto último, hiso que su corazón se volviera voluntarioso y decidido, acostumbrado a ver cumplidos todos los deseos infantiles que cariñosamente eran realizados por Hipólita, Matea y sus hermanas.
Así, el niño...