Simon Bruto

Casi Monologo
La verdad se vuelve enfermiza en los labios de un necio.

Estamos en cualquier Limonada, Fabela, Covacha o en un mísero jacal, lo importante es, que en cualquiera hay vida (sobre vivencia), en ellas hay seres que esperan, que aguardan, ¡Que!, no se, posible pase el día, posible llegue que comer, posible pase Dios o el diablo haga su agosto. En este lugar hay un niño, ¿Queniño?, talvez mío, talvez suyo, no se, ¿Cuantas veces hemos abusado de alguna pobre mujer ignorante y no hemos tenido prudencia?.

Yo, me llamo Simón, mi madre así me llama, solo Simón y, también los demás, mi papa, me tiene otro nombre, me llama bruto, bruto aquí BRUTO allá, también solo BRUTO, Debido a ello es que me declaro Simón Bruto, ya que todos dicen tener dos o mas nombres y a mi me davergüenza tener solo uno; aquí estoy pensando que voy a ser hoy, no tengo a donde ir a comer, por mas que pienso no atino a quien hoy voy a joder; en el mercado ya me dieron color, Don Faustino el de la tienda me la tiene jurada, con el Sayco no voy, le tengo miedo, me puede enterrar como hizo con aquellos chavos que se la debían, es muy malo; la Faustina esa me da, pero quiere que me le monte y¡Como hiede! y si no lo hago no me da nada. –En sus pensamientos esta cuando oye voces conocidas, estos entran en la covacha y de un jalón el hombre tira a la mujer a un cochino catre-, la mujer con molestia le indica que no tiene ganas, que ha sido un día ajetreado y quiere solo descansar. –Con gran enojo, le da gran cachetada y le increpa: Ya que no queres solta la lana, me voy y, no me esperes.-Sollozando la mujer solo le queda decir, ¡Déjanos algo para comer!, el hombre como si nada solo piensa en la cantidad de droga que puede comprar.

El pobre niño, sale de su escondite y comienza a caminar hacia la calle, refunfuñando en su mente ¿Por qué su madre no lo manda a volar? En la calle encuentra su gran amigo “El Mocos”, este tiene similar problema con sus padres, solo que ellos sitrabajan y los dos se ponen unas zumbas de padre y señor y no les sobra nada para alimentar a sus hijos, estos son siete y el mocos el quinto, los mas grandes solo los ve de ves en cuando.

-¡Hola mocos como estas ya comiste!- El mocos moviendo la cabeza en forma negativa y sin ganas de respuesta, solo lo mira, como esperando que le diga que le va a dar algo, solo espera; Simón casi le grita -¡Yasomos dos, eso nos hará fuertes para la consiga!, creo que hoy viene don Cleofás, el vejete aquel que se traba a las buenas de aquí, y cuando viene, las rucas hacen comida y a veces se les cae algo, el viejo siempre trae algo del gobierno y las alecciona para alguna manifestación.- Con parsimonia y cabizbajos caminan hacia la covacha de doña Carmen (una de las preferidas de don Cleofás) yacercándose a ella la saludan: ¡Hola doña Carmelina, como le va!, ella al verlos les increpa -¿Qué paso patojos cabrones hasta hoy se acercan?, los he esperado desde hace rato, los necesitamos exactamente hoy, tenemos que estar en el parque y no tenemos mucha gente, van o no van, ¿Qué dicen?- los dos se miran y Simón le indica:
Oiga doña Carmen, ¿De cuanto se trata?, la ves pasada no nos dieron nada y nide comer, así no baila mija con el señor; ya ve que hasta leñazos hubieron y ustedes a nosotros los patojos nos ponen adelante y quiera o no, le caen a uno sus pencazos , es mas no hemos comido y así ni ganas. La aludida lo mira y piensa: Que patojo, ya se esta avivando y eso no conviene, convencida de tenerlos les indica: Les daré de comer y después se alistan para irnos ya los camiones notardan en llegar.- Uniendo acción y movimiento se acerca a la cocina (Si así se le puede llamar), toma dos platos y saca de una olla unas cuantos frijoles y se los reparte en ellos, acercando dos tortillas frías a cada uno se las da, indicándoles: -Métanle muchachos que se nos hace tarde, don Cleofás no tarda y ya ven como es el, por cualquier cosa después no deja nada, por que se pone como la...