Sindromes
Amorosa anticipación
Ni la intimidad de tu frente clara como una fiesta
Ni la costumbre de tu cuerpo, aún misterioso y tácito de niña,
Ni la sucesión de tu vida asumiendo palabras o silencios
Serán favor tan misterioso
Como mirar tu sueño implicado
En la vigilia de mis brazos.
Virgen milagrosamente otra vez por la virtud absolutoria del sueño,
Quieta yresplandeciente como una dicha que la memoria elige,
Me darás esa orilla de tu vida que tú misma no tienes.
Arrojado a quietud,
Divisaré esa playa última de tu ser
Y te veré, por vez primera, quizá,
Como Dios ha de verte,
Desbaratada la ficción del tiempo,
Sin el amor, sin mí.
Arte Poética
Mirar el río hecho detiempo y agua
Y recordar que el tiempo es otro río,
Saber que nos perdemos como el río
Y que los rostros pasan como el agua.
Sentir que la vigilia es otro sueño
Que sueña no soñar y que la muerte
Que teme nuestra carne es esa muerte
De cada noche que se llama sueño.
Ver en el día o en el año un símbolo
De los días del hombre y de sus años,
Convertir el ultraje de los años
En una música,un rumor y un símbolo,
Ver en la muerte el sueño, en el ocaso
Un triste oro, tal es la poesía
Que es inmortal y pobre. La poesía
Vuelve como la aurora y el ocaso.
A veces en las tardes una cara
Nos mira desde el fondo de un espejo;
El arte debe ser como ese espejo
Que nos revela nuestra propia cara.
Cuentan que Ulises, harto de prodigios,
Lloró de amor al divisar su Itaca
Verde yhumilde. El arte es esa Itaca
De verde eternidad, no de prodigios.
También es como el río interminable
Que pasa y queda y es cristal de un mismo
Heráclito inconstante, que es el mismo
Y es otro, como el río interminable.
Octavio Paz
Antes del comienzo
Ruidos confusos, claridad incierta
Otro día comienza.
Es un cuarto en penumbra
Y dos cuerpos tendidos.
Enmi frente me pierdo
Por un llano sin nadie.
Ya las horas afilan sus navajas.
Pero a mi lado tú respiras;
Entrañable y remota
Fluyes y no te mueves.
Inaccesible si te pienso,
Con los ojos te palpo,
Te miro con las manos.
Los sueños nos separan
Y la sangre nos junta:
Somos un río de latidos.
Bajo tus párpados madura
La semilla del sol.
El mundo
No es real todavía,
El tiempo duda:Sólo es cierto
El calor de tu piel.
En tu respiración escucho
La marea del ser,
La sílaba olvidada del Comienzo.
Bajo tu clara sombra
Un cuerpo, un cuerpo solo, un solo cuerpo
Un cuerpo como día derramado
Y noche devorada;
La luz de unos cabellos
Que no apaciguan nunca
La sombra de mi tacto;
Una garganta, un vientre que amanece
Como el marque se enciende
Cuando toca la frente de la aurora;
Unos tobillos, puentes del verano;
Unos muslos nocturnos que se hunden
En la música verde de la tarde;
Un pecho que se alza
Y arrasa las espumas;
Un cuello, sólo un cuello,
Unas manos tan solo,
Unas palabras lentas que descienden
Como arena caída en otra arena.
Esto que se me escapa,
Agua y delicia obscura,
Mar naciendo o muriendo;Estos labios y dientes,
Estos ojos hambrientos,
Me desnudan de mí
Y su furiosa gracia me levanta
Hasta los quietos cielos
Donde vibra el instante;
La cima de los besos,
La plenitud del mundo y de sus formas.
Jaime Sabines
Bajo mis manos crece
Bajo mis manos crece, dulce, todas las noches.
Tu vientre manso, suave, infinito.
Bajo mis manos que pasan y repasanmidiéndolo, besándolo;
Bajo mis ojos que lo quedan viendo toda la noche.
Me doy cuenta de que tus pechos crecen también,
Llenos de ti, redondos y cayendo.
Tú tienes algo. Ríes, miras distinto, lejos.
Mi hijo te está haciendo más dulce, te hace frágil.
Suenas como la pata de la paloma al quebrarse.
Guardadora, te amparo contra todos los fantasmas;
Te abrazo para que madures en paz....
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