Sistemas electores
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Ensayo
Sistemas electores
Las leyes de cuota, como medidas de acción positiva, no han logrado revertir los obstáculos estructurales y subjetivos que determinan la marginalidad política de las mujeres.
Las mujeres han recurrido a mecanismos de acción positiva en casi todos los países de la región, en algunos casos no han sido efectivospor incorporarse mecánicamente, sin considerar al sistema electoral en el cual se inserta.
Los organismos electorales independientes y eficientes, la consideración social positiva de la inclusión de las mujeres en la representación, la capacidad de articulación para incidir entre mujeres de diferentes partidos políticos, funcionarias estatales y el movimiento de mujeres y las leyes de la aperturademocrática; favorece la participación de las mujeres en la representación.
Sin embargo, el ejercicio de las mujeres en el poder político no concuerda con el papel que la sociedad diseñó para ellas y menos aun coincide con los requerimientos que los varones les demandan y las respuestas que de ellas esperan.
El que las mujeres ejerzan cargos de poder político, se percibe todavía como rupturade paradigmas tradicionales y como amenaza al estatus del poder masculino, apoyado en su supuesta superioridad y que se expresa en un ejercicio de autoridad sobre las mujeres.
Las mujeres electas en los gobiernos locales, requieren mayor información respecto a los marcos legales nacionales e internacionales.
Los defensores de las cuotas hacen tres reivindicaciones. La primera es de carácternormativo: la ecuanimidad y la igualdad requieren que las mujeres estén presentes en los procesos de toma de decisiones, que afectan a la sociedad en su conjunto. Las cuotas, que garantizan la presencia de las mujeres a corto plazo, son el método más efectivo para conseguir alcanzar dicho objetivo. La segunda es de carácter consecuencia lista: las cuotas, que implican una mayor presencia demujeres en el poder, introducirán elementos nuevos en la agenda política y cambiarán los resultados de las políticas de manera que reflejen mejor las cuestiones que afectan a las mujeres. La última es de carácter simbólico: las cuotas educan al público en cuanto a la igualdad de género y demuestran el compromiso que tiene la sociedad con una democracia que se basa en la inclusión. El resto del capítuloevalúa la efectividad de las cuotas con respecto a estas expectativas.
Las listas electorales que elaboran los partidos políticos, cuando la ley electoral no establece alternancia, ubican a las mujeres al final de las listas de candidatos titulares.
En los casos en que se ha introducido una acción positiva en forma de cuotas, se han conseguido importantes resultados en lo que respecta alaumento de mujeres elegidas en las elecciones. Sin embargo, la utilización de las cuotas sigue siendo un tema controvertido.
Aquellas personas que se oponen a las cuotas afirman que son discriminatorias, intervencionistas y fundamentalmente antidemocráticas. Muchos países (incluida Italia, el Reino Unido y Francia) han rechazado el empleo de cuotas a nivel nacional alegando que este sistema esesencialmente contrario al precepto de la igualdad entre ambos sexos consagrado en su constitución o en la legislación nacional.
Las cuotas destinadas a aumentar el número de mujeres en la vida pública se han visto criticadas por ser discriminatorias contra otros grupos sociales. Por otra parte, se ha afirmado que mediante la aprobación de una enmienda constitucional se obtendría una medidapermanente en lugar de temporal para compensar la falta de mujeres en los cuerpos electorales.
Durante los últimos veinte años, el debate en torno a la representación política de las mujeres se ha convertido en una constante en numerosas investigaciones tanto en sociología como en ciencia política. En este sentido, se han desarrollado importantes estudios empíricos, sustentados en rigurosos...
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